Villena aporta 4.200 kilos de tapones solidarios

La Junta de la Virgen en colaboración con el Ayuntamiento de Villena y la Fundación SEUR han conseguir recoger 4.200 kilos de tapones para ayudar a Marcos, un niño de 8 años con una infección en la médula que le mantiene el cuerpo paralizado.

Un año más desde el Ayuntamiento de Villena, la Junta de la Virgen y Fundación SEUR se ha conseguido reunir una gran cantidad de tapones de plástico en el marco de la campaña “Tapones para una nueva vida”, más concretamente, un total de 26 palés y algo más de 4.200 kilos de tapones, “aproximadamente el 10% de los tapones necesarios para lograr el objetivo”, explicaba Manuel Muñoz, presidente de la Junta de la Virgen.

Muñoz también mostraba su satisfacción por el buen resultado, un año más, de esta campaña, agradecía la colaboración del ayuntamiento, los conserjes del mercado y los Luises y aprovechaba para hacer un llamamiento a alguna persona o empresa que pueda ceder un espacio para seguir almacenando los tapones en próximas campañas, pues debido a las obras que se van a realizar próximamente en el mercado van a perder dicho emplazamiento. Al respecto, la edil de Fiestas, Maite Gandía, trasmitía “tranquilidad” a la Junta de la Virgen, pues “el ayuntamiento os ayudará a encontrar un espacio para seguir con esta iniciativa tan positiva”.

Desde el Ayuntamiento y la Junta de la Virgen se agradece a toda la ciudadanía su enorme colaboración para conseguir esta buena causa e invitan a iniciar ya la recogida de tapones para la campaña 2020. Esta campaña solidaria promovida por SEUR en España, Andorra y Portugal ha conseguido ayudar ya a 167 niños y niñas con necesidades especiales, recaudando en total más de 1.200.000 euros. “Esperamos que esto tenga una continuidad y que no acabe nunca para que cualquier niño con pocos recursos pueda tener el mejor tratamiento posible”, ha manifestado Ramón Mayo, Presidente de SEUR en la provincia de Alicante.

El concejal de Medio Ambiente, Paco Iniesta, ha agradecido la colaboración entre instituciones y el pequeño esfuerzo que cada persona realiza de forma individual en sus casas. “Tiene un resultado social muy positivo, pero también conseguimos beneficios medioambientales ya que un residuo bien gestionado se convierte en un recurso”, ha destacado.