Política

Villena cierra 2017 con deuda 0 y un superávit de 16 millones de euros

El alcalde y concejal de Hacienda ha informado sobre las comisiones informativas previas al Pleno de marzo, que se celebra el próximo miércoles. Entre las cuestiones tratadas, ha destacado la presentación de la liquidación del ejercicio económico 2017, que sigue acumulando el superávit presupuestario de la ciudad.
El alcalde destacaba la “capacidad económica” del ayuntamiento, pues el remanente de 2017 hace que el superávit municipal –entre 6 y 7 millones de euros el año pasado, según los criterios contables utilizados– crezca ya hasta una cifra que ronda los 16 millones de euros. Respecto al año pasado, se ha notado el aumento de la recaudación derivado de la regularización catastral, así como “el control del gasto y algunas partidas que no han llegado a ser invertidas”. Así, y a la espera de que el Ministerio de Hacienda dé vía libre a los ayuntamientos para invertir durante 2018 parte del remanente del año pasado, Esquembre estima en “unos 2 millones de euros la cantidad extra que podremos invertir este año si Hacienda, que hasta ahora nos tiene limitados a los ayuntamientos con el techo de gasto, abre la mano y permite las llamadas inversiones financieramente sostenibles”. No obstante, añadía, los últimos rumores hablan también de la posibilidad de abrir la mano en “gasto social”, un extremo que todavía está por confirmar.

Además, añadía Esquembre, por primera vez “el apartado relativo a la deuda municipal recoge que ésta se sitúa en el 0% del presupuesto, es decir, que Villena no debe un euro a nadie, lo que da buena muestra de su cumplimiento de los criterios de estabilidad y la responsabilidad con que se están gestionando los fondos públicos”, decía.

La plaza ha costado unos 600.000 euros
Preguntado por los pagos pendientes de la Generalitat sobre la plaza de toros, Esquembre confirmaba que ya están totalmente liquidados, por lo que el coste de la rehabilitación del edificio para los villeneros ha sido únicamente el derivado de los intereses del préstamo suscrito en su día para pagar el edificio, una cifra que ronda los 600.000 euros.

En este sentido, y a pesar de que puede considerarse poco dinero para un elemento patrimonial tan importante, Esquembre señalaba que “podía haber costado mucho menos dinero, y no podemos olvidar las deficiencias que presenta el inmueble y también que existen otra prioridades. Como Verdes, nos hubiera gustado que en su día el PP y la Generalitat hubieran dedicado esos 15 millones de euros a otras actuaciones, como las referentes a gasto social, instalaciones deportivas, pozos, abastecimiento de agua, alcantarillado o arreglo de calles que nos estamos viendo obligados a realizar ahora, incluso a arreglar la plaza para evitar su derrumbe, pero desde luego no al proyecto que finalmente hicieron”, concluía.

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