Villena salda una deuda de gratitud con el maestro Manuel Carrascosa
Desde el sábado 16 de noviembre de 2013, los restos del músico y compositor Manuel Carrascosa descansan para siempre en el Panteón de Villeneros Ilustres, aumentando así un elenco de insignes villenenses del que ya forman parte Ruperto Chapí, Joaquín María López, Antonio Navarro Santafé, José María Soler y Alfredo Rojas.
Cientos de ciudadanos asistieron a un sencillo pero emotivo acto en el que las dos bandas de música de nuestra ciudad, la Banda Municipal y la Sociedad Musical Ruperto Chapí, se unieron para despedir a una de las personas más importantes e influyentes en la historia de la música en nuestra ciudad, en cuyo legado encontramos, entre otras piezas, el Himno a Villena (puso música a la letra de José Serra), el Himno a la Morenica, el pasodoble de los Maseros o el pasodoble del Centenario de los Moros Viejos, sin olvidar las marchas de procesión u obras más clásicas.
Siempre entre nosotros
Tras interpretar ambas bandas el pasodoble A mi Buñol, ciudad natal de Carrascosa, tuvo lugar un sencillo acto en la capilla del cementerio, abarrotada de descendientes, amigos, músicos y autoridades locales, y que estaba presidida por el féretro con los restos, un retrato del maestro y el diploma que conmemora su nombramiento como Hijo Adoptivo de Villena en 1964. Celia Carrascosa, en representación de los nietos del compositor, pronunció unas breves y sentidas palabras recordando la figura de su abuelo, al que todos recuerdan siempre cariñoso, intentando inculcarles su amor por la música y componiendo con la pluma en la mano. Además, mostró el orgullo de la familia, porque por más que pase el tiempo, la gente nos sigue mostrando en la calle el cariño y la admiración que tenían por él.
Por su parte Francisco Javier Esquembre destacó que Villena es más completa con la figura de Carrascosa entre nosotros, porque su presencia fue un regalo para la vida musical y cultural de la ciudad. Villena y sus fiestas no serían iguales si el maestro no hubiera dado su ser a nuestra ciudad, dirigiendo la Banda Municipal y siendo maestro de una parte importante de los músicos de la Sociedad Musical Ruperto Chapí. Con rectitud en su trabajo añadió el alcalde, trajo arte, inspiración y saber a Villena, un favor que nuestra ciudad le devolvió nombrándolo Hijo Adoptivo más que merecidamente. El traslado de sus restos, concluyó, es un deseo de la familia que el ayuntamiento convierte en obligación, sabiendo que su música permanecerá siempre entre nosotros y nos agrandará.
Gracias a todos
Finalizados los parlamentos, los restos del compositor fueron portados por cuatro de sus nietos y acompañados por toda la comitiva. Manuel y Marisa, hijos del maestro, y sus nietos y bisnietos, encabezaban una marcha que las bandas de música acompañaron con la marcha fúnebre Adiós para siempre, también de Carrascosa, cuyos restos fueron depositados finalmente en su nicho mientras sonaban las notas del Himno a Villena, cantado por muchos de los presentes.
Por último, Manuel Carrascosa agradeció en nombre de la familia la presencia del numeroso público que les acompañó, la predisposición del ayuntamiento para conmemorar como se merece una fecha tan señalada y la participación de las dos bandas de música, señalando, emocionado, que con este traslado se remata de la mejor manera posible todo un año de homenajes con motivo del centenario del nacimiento del genial músico y compositor.