Abandonad toda esperanza, salmo 124º
No teman, que no voy a glosar los aciertos y errores de los concursos literarios de nuestra ciudad, sino a recordarles que en Villena, profesionalmente hablando, también se escribe, aunque los autores en cuestión se marchasen a vivir a la capital del reino o lleven criando malvas trescientos años ya.
El primero es el caso de Gastón Segura, hasta ahora conocido por sus ensayos vinculados a la figura del Generalísimo: A la sombra de Franco e IFNI. La guerra que silenció Franco. Natural de Villena, Segura se marchó a Madrid con la intención de acabar viviendo de las letras, y ahora se descuelga con su debut en la literatura de ficción.
Su primera novela se titula Stopper, y la publica la editorial andaluza Berenice. Se trata de una novela negra protagonizada por un ex futbolista reconvertido en guardaespaldas de un amigo enriquecido gracias a la especulación inmobiliaria. Tras sufrir una lesión y haber visto mermadas sus facultades, el protagonista se vio relegado a jugar en segunda división y, finalmente, obligado a abandonar el mundo del deporte, empezando así una caída profesional que, sin lugar a dudas, es la proyección de su propia decadencia vital. Esta trayectoria ha desembocado en un callejón sin salida de mano de una mujer fatal que lo manipula para que acabe rescatando a su esposo de las garras de unos traficantes de droga colombianos.
La novela, aunque peca de retratar algunos arquetipos del género, se desmarca de la corriente imperante gracias al uso como persona narrativa de la conciencia del protagonista, que se dirige a este a lo largo de una narración de ritmo vertiginoso, cuya materialización física se reduce a los momentos previos a la entrada de este en acción para rescatar al marido cornudo. Además, el estilo literario del autor está más cerca de algunos clásicos de nuestras letras que de los escritores canónicos del género, y su léxico, plagado de expresiones castizas, recuerda más a Gutiérrez Solana, Cela o Juan Marsé, este tan admirado por Segura, que a Hammett o Chandler.
El otro autor al que hacía referencia es José García Hidalgo, pintor de cámara de Felipe V y, como Segura, natural de Villena... aunque los separen tres siglos de distancia. Ya les hablé en su día de sus Principios para estudiar el Nobilísimo y Real Arte de la Pintura, y finalicé mi propuesta en estos términos: "lo que espero es que nuestro Muy Ilustre Ayuntamiento no deje pasar la oportunidad de presentarla en nuestra ciudad como se merece, en un acto de esos que no engordan las urnas pero sí el conocimiento de los asistentes". Pues precisamente unos días después de las Elecciones Generales la figura de este villenense, olvidada hasta hace bien poco, se va a presentar a sus paisanos con los honores que corresponde: este sábado 15, a las siete y media, en el vestíbulo del Teatro Chapí. La obra, por cierto, son dos volúmenes de auténtico lujo conservados en una elegante caja. Si piensan adquirir un ejemplar, vayan en coche aunque vivan cerca.
Ahora solo queda preguntarse: ¿veremos una presentación de Stopper, con presencia de su autor -algo complicado en el caso del pintor de Felipe V-, en Villena?
Stopper está editado por Berenice.
