Y Villena posó con la Copa del Mundo y las dos Eurocopas…
Durante toda la jornada del domingo, Villena albergó en el patio del Ayuntamiento las dos copas de Europa conquistadas por la selección española en 2008 y 2012 junto a la copa del mundo que los futbolistas españoles ganaron en Sudáfrica en 2010.
Desde las 10 de la mañana, los tres trofeos estuvieron expuestos en el patio del Ayuntamiento dando por terminada esta visita a las 20 horas. El delegado provincial en Alicante de la Federación de fútbol de la Comunidad Valenciana, Damián López, junto al delegado en Elda de la Federación de la Comunidad Valenciana y a nuestro paisano Luis García Martínez Luiche, auténtico valedor para que los trofeos llegasen a Villena, hicieron entrega a Fulgencio Cerdán y a Carlos Beltrán de las copas de Europa, para ser expuestas en el Ayuntamiento.
Poco después, el alcalde de la ciudad, Francisco Javier Esquembre, recibía la Copa del Mundo en la puerta del consistorio villenense, que pasó a ser expuesta junto a las dos trofeos anteriores. Con menos público del previsto, a las 10 de la mañana, a consecuencia de las comidas de las comparsas, los presentes pudieron fotografiarse con los trofeos, de los cuales la Copa de Europa de 2008 es en propiedad, ya que, aunque España no ha ganado las tres competiciones seguidas o cinco alternas que fija el reglamento, la competición de 2008 coincidió con el Centenario de la Federación Española de Fútbol y a consecuencia de esta celebración se le regaló el trofeo original a la Federación Española.
Así, la Copa de Europa de 2012 es una réplica, al igual que la Copa del Mundo, que solamente la tiene en propiedad Brasil es necesario, igualmente, ganar tres títulos consecutivos o cinco alternos. Ésta tiene un peso de 6,200 kilos y está bañada en oro, pues solamente la original es de oro macizo.
Al finalizar la recepción, la primera autoridad local agradeció el esfuerzo de Luiche para conseguir que llegasen los trofeos, e invitó a toda la ciudadanía a visitar el Ayuntamiento, cosa que sí hizo a lo largo del día pese al flojo comienzo. Mediada ya la mañana eran importantes las locales, en las que no faltaban cientos de aficionados, niños y mayores, hombres y mujeres, vestidos con la elástica de La Roja.