-Se alcanza la paz en el seno del equipo de gobierno. El PSOE y Los Verdes liman sus asperezas y firman un convenio para regular su relación. “Así ya no tendré que verles las caras todos los días”, afirma el negociador socialista. “Rebota, rebota y en tu culo explota”, responden desde la formación ecologista.
-Mientras Villena y Novelda se pelean en público y con luz y taquígrafos, Elda hace sus deberes por lo bajini y nos levanta el Puerto Seco, el Nodo Logístico, el edificio de la Tercia y hasta la farmacia de Bonastre.
-Cansado de pagar un pastizal cada año, el ayuntamiento ordena el cierre de la piscina cubierta del Centro Deportivo de Villena. “Total, en nada podremos nadar gratis en el túnel subterráneo del paso a nivel de Rosalía de Castro”, señala el alcalde en una videoconferencia.
-Las obras de la electroharinera son despojadas, vilmente y con escarnio público, del récord Guinness que poseían como “La obra pública que más retrasos acumula en el mundo”. Según un portavoz de la Guinness Fundation, “ningún retraso puede compararse, ni de lejos, al de las obras del colegio Príncipe Don Juan Manuel”.
-Tras pagar un millón y medio de indemnización por el parking de la plaza de toros, el ayuntamiento sortea entre los ciudadanos las casi 200 plazas de aparcamiento disponibles. Los exconcejales del PP que dieron el visto bueno al proyecto y sus familiares, principales beneficiados en la rifa.
-Como a partir de septiembre se recobra paulatinamente la normalidad tras la inmunización de la mayor parte de la población, Villena concentra en el último trimestre del año todos los eventos aplazados durante 2021: San Antón, Carnaval, el Ecuador, el Medievo, la Semana Santa, el Rocío, los festivales de música, el Rabalfest y los Moros y Cristianos. Inexplicablemente, a comienzos de 2022 se declara una epidemia de obesidad y alcoholismo.
-Inocentadas 2021: el ayuntamiento presenta, el 28 de diciembre y completamente en serio, una nueva edición de los Presupuestos Participativos.
-La fibra llega al fin al centro histórico de Villena. Gracias un convenio del ayuntamiento con Cáritas y tres Bancos de Alimentos, todos los vecinos del casco reciben un abundante surtido de lentejas, frijoles, habas, garbanzos, almendras y pistachos, así como manzanas, peras, plátanos, uva y naranjas.
-Patrimonio: el éxito en la campaña de recaudación de fondos para rehabilitar Santa María permite cambiar el proyecto sobre la marcha, llevándose finalmente a cabo la propuesta de Sergio Ortín Molina para la reconstrucción de la catedral de Notre-Dame.
-Y para terminar, una que de verdad me gustaría leer: Villena da un ejemplo colectivo de sensatez, afrontando los últimos meses de pandemia con cabeza y responsabilidad y esperando el momento oportuno para recuperar esa normalidad que tanto echamos todos de menos. Mientras tanto, sigan cuidándose y, por favor, no la caguemos a última hora.
¡Feliz año, vecin@s!
