Cartas al Director

A Doña Victoria Tomás

¡Anda hija!, que te habrás quedado como “pa mear y no echar gota” –como solemos decir en Villena–, pues en tu carta publicada en el nº 108 de EPdV, a lo mejor y sin habértelo pedido nadie, te has despachado a gusto y ¡de qué manera!
Pero “pa que veas lo que son las cosas”, en Villena, nuestro pueblo, para bien o para mal, hemos sido más los que hemos votado a Celia Lledó; en la Comunidad Valenciana, los que lo hemos hecho a Francisco Camps, y el próximo mes de marzo, seremos muchos los que, según tú, “harán la barbaridad” de vota a Rajoy; yo uno de ellos. Ignoro si Vd. es de las que vota siempre y a quien, yo puedo asegurarle que siempre he ejercido mi derecho al voto y, últimamente, lo he hecho a esos que Vd. dice que nunca votará.

Con esto no quiero decir que yo sea ni mejor ni peor que Vd., simplemente que somos diferentes en algunas cosas, aunque en otras coincidamos, porque yo también soy de los que en casa separo los envases de plástico y tetrabriks, el vidrio, el papel y cartón de la basura orgánica. Al igual que Vd. nunca la he sacado antes de las 21’00 horas, además, –me imagino que Vd. también lo haría– cuando no había recogida de basura los sábados, la guardaba en casa hasta el domingo y, por supuesto, hasta después de las 21’00 horas. Tampoco se me ocurre escupir en las aceras ni tirar papeles e inmundicias en la calle; es más, cuando las veo cerca del portal de mi comunidad suelo recogerlas y dejarlas en el sitio adecuado.

Pero en su carta, aparte de las pequeñas cosas que he relacionado, no nos cuenta nada de otros aspectos de su vida, como por ejemplo, cuántos puestos de trabajo ha creado; en cuantas instituciones benéficas colabora desinteresadamente, etc. “Pa que vea lo que son las cosas”, yo a mis 72 años cumplidos soy uno de los que todos los Viernes Santo “arrimo el hombre” durante casi 2 horas –este año con lluvia incluida– pues soy portador del paso del Santo Sepulcro, además soy el cobrador y tesorero de la Cofradía, y encima mi señora y yo colaboramos económicamente (pues los dos somos socios) para que una tradición arraigada en nuestra ciudad no desaparezca.

También le dedico las mañanas de los miércoles a la Cruz Roja, conduciendo el microbús, donde aparte de recoger ropa usada de los lugares de recogida y llevarla al Puesto, he llevado a personas mayores al centro de recuperación del CEAM; y últimamente me han destinado a llevar de excursión a los chavales de la Residencia de Peña Rubia. ¡Qué encanto de chiquillos!

También hace unos años, junto con otro colaborador del barrio y mi señora, nos pateamos varias veces todo el empresariado de Villena –que es mucho– con el fin de recaudar fondos para evitar que se hundiera la ermita de San José, declarada en ruinas y edificio emblemático (de los pocos que quedan) de nuestro barrio antiguo.

En la Asociación Pro-restauración de la Ermita sigo colaborando en lo que buenamente puedo y sé. En el Mercado Medieval me podrá ver los dos días junto a la puerta de la ermita, “pasando más frío que un perro pequeño”, cobrando la cuota a los socios que quieren pagarla aprovechando su visita a la Feria.

He ayudado, en lo que he podido y sabido, a mis hijos a crear sus pequeñas empresas, donde actualmente dan trabajo a bastantes productores. Durante sus 47 años he estado trabajando en la misma empresa –la de mis antecesores– siendo los 24 años primeros como sencillo productor y los 23 últimos como gerente y responsable de la misma. Jamás he tenido litigio laboral alguno. Me he llevado bien con todos los trabajadores, todos me recuerdan con agrado y algunos hasta con cariño.

Mientras la edad y la salud me lo han permitido he sido donante de sangre. Ahora desgraciadamente no puedo, pero eso sí, soy donante de todos mis órganos y, por si acaso, llevo encima mi tarjeta ALCER de donante.

Llevo casado más de 45 años y quiera Dios que sean muchos más, no por celebrar las bodas de oro, que también, sino porque nos encontramos muy a gusto los dos. Hemos tenido tres hijos y tenemos siete nietos a los que adoro. Por razones de mi trabajo nunca he salido de festero en septiembre, aunque desde hace muchos años soy protector de la comparsa de Nazaríes y todo ello para apoyar a otra asociación más de Villena. Los domingos por la mañana, que es cuando menos personal auxiliar tienen, voy un buen rato al Asilo a ayudar a las “hermanitas” a dar de comer a las personas mayores que tiene,… etc.

Ya ve que con voluntad se pueden hacer bastantes cosas. Nadie me ha pedido que las diga, solamente me ha movido el contarlas para enterar a Vd. y a los que tengan a bien leer este escrito, que los que votamos a Lledó, Camps y Rajoy también sabemos y hacemos cosas buenas y gratas.

Por supuesto, no le guardo ningún rencor, ni a Vd. ni a los que como Vd. piensan (a Vd. en el fondo si que parece que se le aprecia cierto “ramalillo”). Allá cada cual, sólo sé que gran parte de la Humanidad últimamente se ha dado cuenta en qué sistema político y económico se vive mejor. Y en cuanto a la españolidad de los que vivimos en España, por supuesto que ya éramos antes de la Constitución del 78, lo que sucede es que, desgraciadamente para mi forma de ser, últimamente son ya demasiados los que “no quieren” ser españoles.

Lo de invitarla a café lo veo un poco difícil, pues no la conozco, además de que soy más partidario del “escote” –mis raíces son valencianas–, por lo demás, como seguramente le ocurre a Vd., siento muchas ganas de seguir viviendo y de hacer el bien a los que me rodean.

Fdo: José Navarro Montes

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