Alcaraz somete a Tommy Paul y ya está en semifinales de Wimbledon
Repetirá el duelo del año pasado con el ruso Daniil Medvedev, verdugo del número 1 Sinner
Excepcional reacción de Carlos Alcaraz, 21 años y nº 3 mundial, contra un rival que tradicionalmente es señal de problemas. Los volvió a generar el estadounidense Tommy Paul, 27 años y nº 13. Wimbledon apartó de la central al campeón en unos cuartos de final, pero el español actuó como el rey vigente del All England Club que es y destruyó paulatinamente a su rival, hasta dejarlo noqueado. De menos a más, manejando los tiempos, sin incurrir en imprudencias.
Alcaraz celebró el triunfo en una Pista 1 destrozada, cuyos fondos se encuentran completamente pelados. Son tierra. Lo que deparó no pocos malos botes. Algunos provocaron algún que otro vocablo malsonante del murciano, pero tampoco esa circunstancia le apartó de un objetivo muy ambicioso.
Quiere ser el noveno profesional que revalidad corona en este torneo de un año a otro, el decimotercero de la historia que consuma el doblete Roland Garros-Wimbledon. Sabía que iba a sufrir, pero cada vez se halla más cerca de la gesta.
Derrotó a Paul por 5-7, 6-4, 6-2 y 6-2 en 3h.11', bajo techo debido un día más a la lluvia. Cerca de las siete de la tarde en Londres, las ocho en Alemania. A una hora del comienzo del España-Francia de la Eurocopa en el Allianz Arena de Múnich. A tiempo, porque Alcaraz no se lo quería perder.
Dispone de margen para preparar la semifinal, que será el viernes. Por en medio, dos jornadas de asueto. Repetirá duelo con el ruso Daniil Medvedev. Sorpresa. Aun conociendo la categoría del moscovita, el pronóstico señalaba como favorito al nº 1, el italiano Jannik Sinner, que sufrió mareos durante el tercer set y se despidió de poder vengar las 'semis' de Roland Garros.
Medvedev se impuso por 6-7 (7), 6-4, 7-6 (4), 2-6 y 6-3 en cuatro horas. Cita con Alcaraz, la séptima de su serie, que está 4-2 para el tenista de El Palmar, que doce meses atrás dominó por un triple 6-3 en un césped en el que acumula doce victorias seguidas.
Recelaba, con razón, del eléctrico Tommy Paul, quien le había sustituido en el palmarés de Queen's, que sumaba ocho victorias consecutivas en hierba. Estaban 2-2, siempre sobre pista dura y nunca en Grand Slam. Ocasión grande, dominio de un Alcaraz que en condiciones normales, en forma y al mejor de cinco sets, está varios escalones por delante.
Lo pasó mal al principio, cuando se vio 5-7 (hora y doce minutos de set), 0-2, perdiendo 15 de los últimos 20 puntos en ese estado de partido. Sólo 1 de 9 puntos de 'break' conseguidos. Sufriendo. Pero, como sucediera ya en rondas anteriores, de las complicaciones surgió el Alcaraz más rotundo.
Se disparó, tomó la iniciativa con un punto mayor de agresividad. Paul iba al límite, no le queda ni un resquicio de riesgo. El español descolocó al americano, no frenó hasta destruir totalmente al norteamericano. Excelente Alcaraz, lo tiene todo para seguir triunfando. Está en sus manos, depende de sí mismo cuando su estado personal es óptimo.