Empresas

Andrés Martínez: “El futuro de la agricultura de Villena está asegurado. Se han hecho bien los deberes y el esfuerzo está dando sus frutos”

En medio de la intensísima crisis económica que vive nuestro país, hay un sector que está aguantando con fortaleza e incluso creciendo: la agricultura. Tradicionalmente “en crisis” debido a su escasa rentabilidad, resulta ahora el único bastión al que agarrarse para salvar las cifras de empleo, y de hecho supone una auténtica tabla de salvación para muchas familias villeneras, ya que algunas de las empresas más grandes de nuestra ciudad se dedican, como Horfres, a la agricultura.
¿Está afectando la crisis económica a las empresas agrícolas?
Sí, porque la crisis financiera es transversal. Nuestras empresas también necesitan dinero para funcionar, porque se han perdido viejas costumbres agrícolas, como ir con el dinero por delante. Por lo demás, hemos sabido vivir sin grandes márgenes, y así seguimos, basados en un principio que sostiene que “para ganar, hay que trabajar”.

Y en el caso concreto de Horfres, ¿se ha notado un descenso de las ventas?
Estamos igual. No somos un ente especial al margen del resto, pero nuestros productos son de primera necesidad y siguen consumiéndose, es decir, no nos afecta la crisis de consumo, pero sí la financiera, porque se nos restringe el acceso al crédito igual que a las demás empresas. El verdadero problema financiero lo tienen los bancos, así que estamos pagando justos por pecadores.

¿Con cuántos trabajadores cuenta Hofres en la actualidad? ¿Se ha tenido que ajustar la plantilla o por el contrario se han incrementado las contrataciones?
Tenemos 150 empleados, con picos de 170, y lo cierto es que sí que ha habido pequeños incrementos en la plantilla. No obstante, hay un componente estacional importante, aumentando la contratación en invierno/primavera y bajando en verano. Con el frío comemos más cocido, siempre ha sido así.

¿Qué piensa al ver que los trabajadores españoles, que durante años no han querido saber nada del campo, hacen ahora cola para dejar su currículum en las empresas agrícolas?
Parece que estemos perdidos en el túnel del tiempo… Recuerdo hace 10 años, cuando tuvimos que ir hasta el Mar Menor para encontrar una cuadrilla de trabajadores inmigrantes para mantener abierta una sección entera, porque aquí no encontrábamos a nadie. Hoy mantenemos esa sección, y da trabajo a 25 personas. Al margen de esto, éste es el momento ideal para formar buenos equipos, aprovechando la oportunidad de contratar a los mejores sin mirar su nacionalidad.

Hace un año Horfres inauguró en Cuellar (Segovia) su primera planta de producción y distribución de hortalizas fuera de Alicante. ¿Qué valoración hacen de este primer año? ¿Proyectan nuevas aperturas?
Altamente positiva. Se han colmado las expectativas con creces, sirviendo mejor a nuestros clientes y llegando a clientes nuevos. A veces, uno más uno es más que dos, que es lo que nos ha pasado ahora. Respecto a nuevos proyectos, están en mente, pero no es momento de tirarse a la piscina. Sí puedo decir que cerraríamos nuestro círculo con una nueva planta en el sur de España.

Asimismo, diversificaron su negocio con la apertura de Germifresh, una planta de germinados. ¿Va a continuar la expansión del grupo?
A este proyecto le está costando arrancar, porque es un producto de gama alta, casi de lujo, y no de primera necesidad. El parón del consumo se deja notar, pero vamos a seguir apostando por este producto.

También forman parte de un consorcio exportador con otras empresas hortofrutícolas valencianas. ¿Qué tal está funcionando?
Poco a poco, pero bien. Somos 5 empresas de la Comunidad Valenciana abriéndonos puertas en el mundo. Hasta ahora, hemos consolidado clientes nuevos en Francia e Italia.

¿Existe algún nuevo proyecto que se nos escape?
Vamos a apostar decididamente, de la mano de productores alemanes especializados, por la agricultura ecológica. El consumidor es cada día más exigente y es un mercado en crecimiento. Ya aplicábamos técnicas propias de la agricultura ecológica, pero ahora vamos a implantar nuevos procesos. Hay que dar servicio a las demandas del mercado… así que en marzo o abril ya tendremos zanahorias ecológicas, en principio destinadas a la exportación.

¿Cómo ve el futuro de la agricultura villenera y española? ¿Y de la economía en general?
En Villena, bien, porque se han hecho los deberes. Se han mejorado las estructuras, modernizado los regadíos, agrupado la propiedad y mimado los canales de comercialización… y la rentabilidad de este proceso nos ha permitido realizar el cambio generacional, poniéndonos al día en formación y en la aplicación de técnicas modernas. Hemos hecho realidad lo que para otros es un sueño: aplicar la I + D + I. En otros lugares, veo un futuro más negro… Respecto a la economía en general, son ciclos. El bueno te trae el malo, y el malo nos traerá el bueno.

Las lluvias caídas en los últimos días, ¿han resultado beneficiosas para el campo o han sido dañinas?
Buenísimas. Siempre que no granice, la lluvia es bienvenida.

Hablando de agua, ¿alguna novedad al respecto del trasvase Júcar-Vinalopó?
Empieza a haber una nueva sintonía, fruto de una reunión en julio entre el Secretario de Estado de Aguas, Josep Puxeu, y José Ramón García Antón, que supuso un punto de inflexión. Durante años se ha ninguneado a los usuarios, y ahora hay que recuperar el tiempo perdido, aunque tenemos una asignatura pendiente: establecer un nuevo convenio para concretar calidad y precio.

Y sin dejar el agua, y ya para cerrar esta entrevista, ¿cómo se encuentra en este momento el proyecto de instalar una embotelladora de agua mineral en Villena?
Se va haciendo camino poco a poco…

(Votos: 0 Promedio: 0)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba