Apocalipsis now
Abandonad toda esperanza, salmo 57º
Hace unos años resultaba impensable lo que ha conseguido Vertigo, la línea adulta de DC Comics: introducir en el gran mercado del cómic norteamericano ideas que hasta la fecha estaban relegadas al ámbito de la historieta independiente.
Buena muestra de ello es Los Invisibles, la obra magna de Grant Morrison. Cuando se estrenó Matrix, que pronto se convirtió en un gran éxito y revolucionó la ciencia ficción acercando a jóvenes generaciones adictas a los videojuegos una pertinente reflexión sobre la realidad, el guionista escocés no tardó en poner un pleito a la productora. Más allá de la boutade de Morrison, pues las ideas que se plantean en su obra y en la película de los Wachowski ya estaban en los textos de Platón, hay que reconocer más de una similitud entre las desventuras del mesiánico Neo interpretado por Keanu Reeves y el grupo terrorista liderado por King Mob.
Explicar el argumento de Los Invisibles resulta harto complicado: podría decirse que trata del enfrentamiento a lo largo de varios siglos entre aquellos que abogan por mantener el status quo y controlar y mantener alienada la psique del ciudadano medio, y sus principales enemigos, los Invisibles, una sociedad secreta que está detrás de todas las revoluciones que han supuesto una fractura en el devenir del ser humano como elemento social. Incluso el propio Grant Morrison ha afirmado que le resulta complicado hablar de su obra, si bien tiene muy claro lo que le gustaría conseguir con ella: que sus lectores vieran el mundo como una escuela, y que se dieran cuenta de que ha llegado el momento de levantarse, quemar los pupitres y salir a la calle.
Menos compleja pero tan provocadora como la anterior es Transmetropolitan, o el nuevo periodismo de Tom Wolfe y Hunter S. Thompson llevado al noveno arte. Y es que en la tradición de los autores de Ponche de ácido lisérgico y Miedo y asco en Las Vegas entra Spider Jerusalem, protagonista de la colección y alter ego del guionista inglés Warren Ellis.
La serie arranca con el abandono de su retiro espiritual por parte del protagonista y su regreso a la gran ciudad para volver a escribir una columna seguro que más interesante que la que ustedes están leyendo ahora mismo. A partir de esta premisa, una mera excusa argumental de la que partir, Warren Ellis escupe su visión de un futuro deshumanizado y brutal que se parece demasiado a nuestro presente. Y es que si Morrison pone al descubierto la Historia Oculta de la Humanidad, Ellis hace hincapié en que solemos permanecer ajenos a hechos que están a la vista de todos y que nos recuerdan que el futuro ya está aquí.
Así pues, la revolución no será televisada, pero se encuentra dentro de unas viñetas, en tu librería más cercana. ¿Vas a permanecer al margen?
Los Invisibles y Transmetropolitan están editados por Planeta de Agostini Comics.