Artistas, plas, plas
Cuanto tiempo sin ver por televisión a mis amigos los artistas. Admirable demostración la de los actores y actrices, cantores y cantoras, españoles, argentinos y demás cultura sobre la manifestación que se celebró el sábado pasado en Madrid. Ellos, tan dignos como siempre, realizaron su propio comunicado un día antes de la manifestación. En su rueda de prensa, un gran actor, y no va de coña, como es el argentino Federico Luppi, se permitió el lujo de decir textualmente nos va la vida en crear un cordón sanitario para evitar que esta derecha cerril, troglodita y casi gótica se adueñe del pensamiento español. Se trata de evitar que España se rompa.
Aunque sepa que no me va a leer y que esta tribuna desde la que llego a ustedes es limitada, desde aquí le digo al señor Luppi y a todos los que piensan como él que se vayan a freír espárragos. Son ustedes una panda de miserables, majaderos y mequetrefes indignos del favor del público.
¿Pero quién leches se han creído ustedes que son, culturilla patética, para darnos lecciones de algo? Vergüenza debería darles a todos los que rodeaban al señor Luppi oírle decir tal sandez y no corregirle al instante. Que se vaya a su argentina natal a dispararle los mismos exabruptos al bueno de Kirchner, que se vaya a Venezuela a decirle troglodita al gran Chávez, que se vaya a Cuba a decirle al dictador comunista Castro que se cree un cordón sanitario para que la izquierda antidemócrata a la que representa deje paso a la democracia de una vez.
Estoy harto, y disculpen el tono de esta columna, pero es hora de que nos rebelemos de una vez contra esta patulea que sólo sabe mirar hacia un lado, y que dispara veneno contra todo lo que no huela a la izquierda rancia y cavernícola de la que son defensores. Hace poco más de un mes que les hablaba sobre la manipulación que, según el camarada Llamazares, José Blanco y alguno que se fue de Izquierda Unida cuando empezaba el hundimiento como Diego López Garrido, hacía el PP de la AVT. A todos estos no les he escuchado decir una palabra en defensa del PP por el ataque furibundo de los artistas, ni siquiera un comunicado de las Juventudes Socialistas defendiendo la democracia.
Equivocan sus dardos y se dedican a insultar al PP, a sus afiliados, simpatizantes y votantes. Los dardos sólo hay que dirigirlos hacia una diana y no es precisamente a la que pinta la izquierda nacionalista vasca con la cara de políticos no nacionalistas. Si pusieran tanto empeño en ningunear y menospreciar a la izquierda nacionalista vasca como lo ponen en intentar acorralar al PP, otro gallo nos cantaría, y no canciones de Víctor Manuel y Ana Belén precisamente.
Lamentablemente para España y para todos los que la queremos, los peores presagios se han cumplido y los terroristas socialistas vascos han vuelto a atentar, matando a dos personas y dejando destrozos por importe de varias decenas de millones de euros que, como siempre, deberemos asumir todos nosotros. Para estos artistas de pacotilla, al igual que para los políticos rastreros como Carod, lo importante es arrinconar al PP, acudir a manifestaciones, sean del tipo que sean, para corear consignas en su contra y tratar de aislarlos socialmente.
El diálogo no ha servido para nada porque ha quedado claro que los terroristas sólo entienden de bombas, pistolas, asesinatos y extorsiones, pero claro, la culpa de las muertes, como siempre, es del PP. Artistillas, váyanse ustedes a escardar boñigas porque para decir tonterías ya tienen los escenarios.