“Durante el trabajo estamos al 100% entregadas a nuestra profesión. No hay espacio para el miedo”

Desde EPdV, todos los días nos sumamos a los aplausos con los que la ciudadanía de Villena está agradeciendo el trabajo de todas aquellas personas que luchan día a día contra la pandemia de Covid-19.

No obstante, hemos querido conocer en primera persona cómo están viviendo la situación los profesionales que trabajan en la primera línea del sistema sanitario. Para ello hemos hablado, primero, con Laura Catalán, enfermera en el hospital de Elda, y hoy lo hacemos con Juana Hernández Prats y Esperanza Verdú Calabuig, también villeneras y enfermeras, en este caso del Centro Integrado de nuestra ciudad.

¿Qué noticias teníais los profesionales sobre la pandemia? ¿Estabais más avisados que el resto de la ciudadanía o también os ha sorprendido su virulencia?

Conocíamos las mismas informaciones que daban los medios de comunicación, como el resto de ciudadanos. Realmente, hasta que la OMS no declaró oficialmente la pandemia todo era muy confuso y nada alarmante, era otra gripe más. Obviamente, ahora es evidente que no era otra gripe más, y su virulencia nos ha sorprendido a todos.

¿Cómo y cuándo se empieza a notar en el Integrado que esto era mucho más serio de lo que pensábamos?

El miércoles día 11 de marzo ya tuvimos una reunión sobre el protocolo a seguir en el Centro Integrado, el uso de EPIS (equipos de protección individual) y la forma de proceder ante los casos que nos pudieran venir. Esto y la información que todo el mundo teníamos ya, de lo que estaba sucediendo, nos puso en alerta como sanitarios.

Imagino que la forma de trabajar, los turnos, las precauciones… habrán cambiado completamente. ¿Cómo es ahora un turno de trabajo?

Los turnos de trabajo son los mismos. Sin embargo, la forma de trabajar, las precauciones y la distribución de espacios (creando corredores, limpios y sucios) han cambiado totalmente. El objetivo es siempre buscar la mayor seguridad, tanto para los pacientes como para todos los trabajadores del centro.

¿Da miedo trabajar en estas circunstancias, o una llega a olvidarse de la posibilidad de contagio?

Da mucho miedo, tanto al salir de casa como al volver. Pero durante el trabajo estamos al cien por cien entregados a nuestra profesión. Ahí no hay espacio para el miedo.

Una de las mayores reivindicaciones de los profesionales sanitarios es la falta de material de protección. ¿Cuál es la situación en el Centro Integrado?

La situación no es distinta a la del resto de España. Gracias a las donaciones de varias empresas de nuestra comarca y de muchos particulares, a los esfuerzos de nuestra supervisora y a nuestra capacidad para idear soluciones con los recursos que tenemos, vamos salvando la situación...

Otra cuestión muy candente es la posibilidad de colapso del sistema. ¿Es posible llegar a ese punto en Villena?

El no haber tenido apenas contagios iniciales y la buena respuesta de la ciudadanía de Villena, quedándose en casa, hace pensar que eso no va a suceder aquí. Por otra parte, es triste que hayamos tenido que tener este problema tan grave para que la gente entendiera lo que es en realidad un servicio de urgencias hospitalario. Esta situación ha hecho que se descongestione el servicio normal y se atienda lo que es verdaderamente urgente.

¿Cómo estáis recibiendo los profesionales las continuas muestras de cariño y solidaridad de la población?

Con muchísimo agradecimiento y muy emocionados.

¿Os gustaría decirle algo a la ciudadanía para terminar?

Darles las gracias, de parte de todos nuestros compañeros, por el comportamiento que está teniendo la gente de Villena y comarca quedándose en casa. Esto es lo que más nos ayuda. Sabemos que desde la Gerencia, cuando todo esto pase, se agradecerá oficialmente a todo el mundo su colaboración desinteresada.

Y pensad que, cada día que pasa, es un día menos que nos queda para superar esta pesadilla.