En enero nos felicitábamos por la puesta en marcha del Plan de Dinamización del Producto Turístico, que supondrá una inversión de 2 millones de euros durante los próximos dos años destinados a potenciar nuestra infraestructura turística con proyectos como la musealización del castillo y la creación de un centro de interpretación y recepción de visitantes del monumento, así como otro en el futuro museo de la Electro-harinera, la renovación y mejora de la señalización turística o el acondicionamiento del espacio entre el nuevo aparcamiento del Vial de Las Cruces y el Castillo. En aquel entonces, titulábamos nuestro editorial afirmando que apostar por el turismo es apostar por el futuro.
Y hoy volvemos a felicitarnos, porque gracias a la consecución de una nueva subvención, la alegría es doble. En efecto, la ayuda de 2.148.560,86 euros financiada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) para llevar a cabo un Programa de Revitalización Urbana y Social del Centro Histórico, que junto a otros 920.000 que aportará el propio Consistorio alcanzan un total de 3 millones, supondrá una nueva inyección de liquidez perfectamente complementaria con el Plan de Dinamización y que permitirá, entre otras cuestiones, la reurbanización de la plaza Mayor, el traslado del Centro de Mayores (CEAM) desde su actual ubicación hasta el Hotel Alicante, la construcción del Edificio del Saber, que albergará entre otros servicios la Escuela Oficial de Idiomas, o la creación de un Centro de Turismo (CdT) en la Pedrera, donde también podría construirse la futura Comisaría de Policía Nacional, y todo ello acompañado de un programa integral para lograr evitar la exclusión social de las personas que habitan en la zona y favorecer su integración laboral.
El lento pero inexorable declive de la industria tradicional villenera, en especial el sector calzado, así como la destrucción de empleo en sectores que han vivido un gran auge en los últimos años, como la construcción, otorgan aún más valor a estos proyectos económico-sociales, a los que podemos sumar otras iniciativas como la adhesión de Villena a la Asociación Española de Ciudades del Vino, puesto que vienen a impulsar la necesaria transformación de Villena en una ciudad comercial y de servicios, potenciando su oferta y favoreciendo la toma de otras medidas necesarias para conseguir atraer a cada día más visitantes, con mayor poder adquisitivo y con estancias de mayor duración.
Por ello, no cabe sino felicitar a quienes han trabajado durante meses para conseguir estas ayudas y desearles el mayor de los éxitos a la hora de convertir estos proyectos en realidades.
