El Periódico de Villena se hace eco hoy de dos historias diferentes aunque con un denominador común. Por un lado, una de las caras de la fallida urbanización Villena Hills: los continuos asaltos a las viviendas vacías, en la mayoría de los casos realizados por drogodependientes que pagan así sus dosis, adquiridas en el barrio San Francisco. Por otro, el comunicado de la Asociación de Vecinos del Rabal al que se ha unido esta semana la formación política UPyD denunciando la impunidad con que se trafica con heroína en Villena, y más concretamente en las inmediaciones de nuestro icono turístico por excelencia: el castillo de la Atalaya.
Con todo, lo más grave de este asunto no es la existencia de drogadictos, pues siempre los ha habido, ni tampoco la llegada de muchos adictos de otras poblaciones a Villena atraídos por las facilidades con las que se desarrolla el mercado del narcotráfico en nuestra ciudad, ni tan siquiera el repunte en el consumo de heroína entre los más jóvenes, después de unos años en que había conseguido controlarse aquella terrible plaga de los años 80. Lo peor, con diferencia, es la ya citada impunidad, la dejación de funciones por parte de las autoridades políticas y los mandos policiales, que conocen a la perfección como cualquier vecino del Rabal o del barrio San Francisco quiénes son los vendedores, entre otras cosas porque algunos de ellos ni siquiera esconden sus coches de gama alta, con los que circulan orgullosos por unas calles que parecen controlar a su antojo.
Resulta sencillamente inexplicable la falta de actuaciones contra estos individuos, máxime cuando, como denuncian los vecinos del Rabal, todos saben quiénes son, dónde están y a qué se dedican. Además, es imposible desvincular este problema de otro que afecta al común de la ciudadanía, porque quienes compran esa heroína vendida sin mayor problema en la Pedrera y el barrio San Francisco, son quienes previamente han reventado escaparates y cajas registradoras, robado bolsos y carteras, para poder pagarse su adicción. Por eso, no podemos dejar de preguntarnos qué hace el ayuntamiento, empezando por su concejalía de Seguridad Ciudadana, qué hace la Policía Local y qué hace la Guardia Civil. Si acaso hacen algo, claro.
Nota de Redacción: El Periódico de Villena va a tomarse un breve descanso vacacional. Con tal motivo, el próximo viernes, día 25 de julio, no habrá edición de nuestro periódico. Volveremos a estar con todos ustedes la semana siguiente, el viernes 1 de agosto. Gracias por su comprensión.
