Gritos
Y entre las tinieblas en las que nos sumen las noticias cotidianas, nadando, como estamos, en medio de un mar de hipocresía, falsedad, egoísmo y ambición sin fin. Cuando parece ser que se ha implantado entre nosotros la Ley de la Selva, o comes o te comen... entre tanta oscuridad, de golpe te deslumbra un inesperado rayo de luz.
Creyendo haber perdido toda esperanza, ese haz de luz te devuelve la confianza en el ser humano, nos hace pensar que no todo el mundo es igual y que si hubiese más personas como las que ahora voy a presentar, este mundo sería un poquito mejor de lo que es.
Si les hablo de Francisco Penadés Albero, seguramente muchos de Uds. recordarán que es el autor de la letra del himno del Villena, otros lo conocerán por las numerosas poesías que ha escrito bueno, pues unos y otros, y los que no lo conocen también, deben saber de una obra maestra que ha firmado recientemente.
Se trata de la letra del tema principal de un cortometraje que ha sido grabado este verano en las playas de Adra (Almería) de forma absolutamente altruista y que, bajo el título Sol y Playa, conmovió al público del certamen cinematográfico de dicha población. No ganó dicho certamen pero resultó ser de los más comentados dice Francisco con satisfacción. Y razón no le falta para estar satisfecho, porque el premio no consistía en algo tan simple como el metálico de la dotación del premio, sino en llegar al fondo de las personas, conmover al público y transmitir un mensaje nítido y a la vez tan contundente como se describe en ese video.
Patricia Ordóñez y Delfín López pusieron la voz, Alejandro Gómez y Julio Santos los coros, la producción y los arreglos. Y esta es la magnífica letra que creó Francisco:
Cruzan el charco. Para volar como gaviotas. Vienen buscando una ilusión que tienen rota, que tienen rota. / Vienen nadando en las tormentas del infierno, y recordando a los que mueren en su pueblo. A los que quedan en su pueblo. / Y hay gritos perdidos, callados, ahogados, en el mar de la esperanza. Gritos sufridos, quemados, heridos por el hambre de una lanza. Quieren vivir, sólo quieren vivir. / Sueñan con sueños muertos, sus ojos abiertos, sus manos desnudas despiertan en playas. Las mentes confusas lloran y no callan, sus lágrimas piden pan para vivir. Sólo para vivir. / Y hay gritos perdidos, callados, ahogados, en el mar de la esperanza. Gritos sufridos, quemados, heridos por el hambre de una lanza. Quieren vivir, sólo quieren vivir. / Cruzan el charco para evitar su derrota. Vienen nadando rasgando hasta sus ropas. / Y hay gritos perdidos, callados, ahogados, en el mar de la esperanza. Gritos sufridos, quemados, heridos por el hambre de una lanza. Quieren vivir, sólo quieren vivir.
Es evidente que el tema del cortometraje es la inmigración ilegal, la muerte de aquellos que vienen en patera y la amargura de quien, a pesar de tener la suerte de llegar a tierra, se encuentran que esto no es, ni mucho menos, el Edén. Es un trabajo cargado de solidaridad, un ejemplo de sensibilidad humana, de humanidad al fin y al cabo. Cuenta Francisco que en Youtube el video está recibiendo muy buena acogida y que seguirán divulgándolo allá donde puedan. Me gustaría, desde estas líneas, proponer a los medios de comunicación locales que se hagan eco de este video. Una vez más, felicidades, Francisco.
Si teclean esta dirección en su navegador, podrán visualizar el video y escuchar la canción de Francisco: www.grafxdigital.com/solyplaya/