La Generalitat estudia ampliar el aforo de las terrazas, abrir los gimnasios y liberar el ocio educativo
Hoy toca decidir los próximos pasos de la desescalada, pero no se esperan ni el acceso al interior de los locales ni tocar el cierre perimetral y el toque de queda
Hoy es un día clave en el seguimiento de la desescalada en la Comunidad Valenciana. Después de 15 días desde el inicio de la relajación de las restricciones vuelve a reunirse la comisión interdepartamental y, pese a que no hay nada decidido, fuentes del Botànic afirman que todo va encaminado a que haya algunas reducciones en las restricciones.
¿Cuáles? No son previsibles grandes cambios en el panorama general de limitaciones, pero sí suavizar estas. Una decisión que tiene visos de prosperar es la ampliación del aforo de terrazas de bares y cafeterías. También es previsible que se libere el ocio educativo (fundamentalmente las actividades extraescolares), que ya es una propuesta que la vicepresidenta y líder de Compromís, Mónica Oltra, puso encima de la mesa en la reunión anterior.
No es descartable tampoco que se revise la situación de los gimnasios, los únicos en toda España que continúan cerrados para la actividad en su interior. El director general de Deportes de la Comunitat Valenciana, Josep Miquel Moya, aseguró ayer a la Asociación de Centros Deportivos que serán “coherentes” a la hora de tomar una decisión.
Grandes cambios, como la apertura del interior de los locales de hostelería, el retraso del toque de queda o el levantamiento del cierre perimetral de la Comunidad Valenciana no se esperan aún.
La idea tras el encuentro con los expertos y los comentarios de distintas fuentes del Ejecutivo es que se quiere avanzar un paso en la desescalada de las restricciones contra el coronavirus en la Comunidad Valenciana. Las cifras de incidencia de la pandemia lo justifican. Incluso hacen difícil de sostener una decisión contraria, según las fuentes.
No destruir lo conseguido hasta ahora
En cualquier caso, la consideración de los expertos es que se debe mantener la corresponsabilidad de la ciudadanía, especialmente de cara a Fallas, Semana Santa y Pascua, para evitar conductas de riesgo. La tesis es que no se puede destruir lo avanzado en las últimas semanas.
Lo innegable para los científicos es que existe “una mejora generalizada”. Se ha pasado de una incidencia acumulada de más de 1.400 casos a sesenta. Sin embargo, como Puig remarcó ayer, persiste una buena dosis de incertidumbre por la evolución de las nuevas variantes del virus y por la todavía alta ocupación de las UCI.