Malos tiempos para la lírica… y peores para la prosa
Quiero comenzar mis reflexiones diciendo que soy un aficionado, o un vicioso (no sé exactamente, ya se ocupará alguno de calificarme) de leer todas estas páginas relacionadas con el pueblo.
Leo las noticias, la mayoría de los artículos, y sufro a muchos de los foristas. Estas páginas se han ido llenando de una serie de personajes que, amparados en el anonimato o en algún absurdo nombre de guerra, se permiten todo tipo de descalificaciones e insultos hacia la persona que los firma. Hubo un tiempo en que a pesar de las discrepancias estos comentaristas quedaban para irse a comer o cenar; seguramente porque había una cosa por en medio tan sencilla como es la educación.
Aquí todo vale. He llegado a la conclusión de que ni hace falta leer el artículo, basta con ver de donde proviene para tener preparado un Pues anda que tú, un Mira que los otros o sencillamente hacer referencia a su color político si la persona en cuestión lo tiene.
Y ahora viene aquello de la gota y el vaso; esa pequeña frontera que debería existir, desde mi punto de vista, entre lo personal y lo público de alguien; pues bien, ni eso se respeta. Recientemente hemos visto verdaderas aberraciones publicadas de diferentes personas del pueblo, que sin entrar a valorar si son o no verídicas, hay una cosa que esta clara, y es que a ninguno nos importan, creo y repito deberían quedar dentro de lo personal. Y lo peor de todo no es el hecho de que esto se publique, después de todo los artículos van firmados y me imagino que ya responderá de los mismos, es la sarta de comentarios que vienen a continuación alimentando el fuego (eso sí, desde el anonimato).
Y ya para terminar, quiero hacer referencia a otra cosa que últimamente me viene tocando las narices, y es el hecho de que para descalificar unas determinadas actuaciones (o no actuaciones) municipales se viene utilizando como arma arrojadiza por parte de ciertos sectores progres la organización de los conciertos de Karina-Los Mismos y Luis Aguilé, sin tener el mas mínimo respeto por todas esas personas que tuvieron lo que hay que tener y llenaron las dos veces. Ni me gustan los unos ni el otro, y no vale hacer alusión a la gratuidad, pues otros ha habido del mismo precio terminados en fracaso.
Lo mismo hubiera quedado mejor el nombre del grupo que la canción.