Cartas al Director

Mirando desde el balcón de la Comparsa de Cristianos a nuestra Plaza Mayor

El pasado 6 de mayo –con motivo del acto conmemorativo que todos los años se le ofrece a nuestro recordado paisano D. Ruperto Chapí Lorente– observaba desde el balcón de la Casa de los Cristianos, como se iban concentrando en la plaza Mayor (la Plaza Vieja como dicen algunos, o plaza de los Cristianos como se le conoce ahora) las bandas de música que venían a actuar para esta ocasión –la de Águilas, la de Cabezo de Torres y nuestra laureada Banda Municipal– y a la vez al público, que se congregaba para presenciar la interpretación (por las tres bandas) de “El Puñao de Rosas”, esperando a que llegasen las autoridades.
Miraba con cierta pena el estado en el que se encuentra la plaza, poco acorde con el que en realidad debiera tener una Plaza Mayor, no guardando relación para nada con su remozado entorno. Observaba como los músicos y forasteros hablaban entre ellos mirando la plaza y las placas que hay puestas en la fachada de la casa y yo me preguntaba, ¿qué pensarán estos señores de todo lo que están viendo? ¿Estarán haciendo comentarios de cómo se encuentra la plaza en general? La Plaza Mayor de los pueblos, que yo sepa, está muy bien cuidada, siendo lugar de obligada visita de cualquier un turista que vaya de paso y quiera conocer algo de la ciudad, preguntando siempre dónde se encuentra la misma. Mi pensamiento en ese momento fue, si vienen a Villena preguntando por la nuestra y se dirigieran a mí personalmente, los enviaría a la Plaza de Santiago y evitaría en lo posible que pudieran venir a visitar ésta.

El año pasado se celebró en esta plaza la Feria del Libro pero este año, a petición de los propios expositores, se decidió cambiar la ubicación realizándose en la Plaza de Santiago, ya que la imagen que daba la plaza no era la más indicada. Sé que en Villena hay mucho tajo donde realizar obras y unas son más prioritarias que otras pero, en mi modesta opinión, ésta es una de las principales actualmente, máxime ahora que de alguna forma en todos sus alrededores vienen realizando obras de mejoras y embellecimiento. No trato de cargar la culpa a los actuales dirigentes de nuestro pueblo (aunque la Sra. Alcaldesa viéndola todos los días debía haber tomado más interés por hermosearla) pues el problema viene de corporaciones anteriores.

Paso de comentar aquí la historia que la plaza tiene sobre sus espaldas, ya que se ha escrito y hablado mucho sobre ello, pero sí quiero dar unas pequeñas pinceladas de los proyectos que se han hecho en distintas ocasiones y han quedado todos en el olvido, sin llegar a realizarse ninguno. Hace unos años se descubrió de nuevo la fuente de los chorros que había sido tapada en el año 1977 quedando toda ella a la vista, pero ahí se acabó todo. Considero que se debía haber continuado con el proyecto de la plaza.

Existen, que yo sepa, al menos dos proyectos: uno del Arquitecto Municipal D. José Beneyto Bernacer –del año 1969– y otro posterior –del año 1.982–, de D. Santiago Varela Botella (arquitecto) y D. José Ramón Vera (Ingeniero de Caminos). Este último incluso apareció publicado en Sumal Cuadernos de Cultura Artística –en su nº 13 correspondiente al mes de mayo de 1982–, mostrándose el estudio sobre la plaza así como el croquis de cómo quedaría una vez realizado uno de los dos proyectos (como puede apreciarse en las fotografías). Han pasado treinta y siete años y está igual, mejor dicho peor. No se ha hecho nada de lo proyectado en uno ú otro sentido, anulando por completo estos proyectos ya que, actualmente, está previsto construir en un lateral de dicha plaza el Centro Joven y Hotel de Asociaciones, según está anunciado y aprobado en el Pleno del Ayuntamiento del pasado mes de junio. El edificio no guarda relación alguna con los anteriores proyectos de la plaza ni con el casco antiguo donde estará ubicado.

También me consta que los vecinos del Barrio del Rabal, al que pertenece esta plaza piden que se vuelva a colocar la celebre Torre del Orejón que existía hace dos siglos, pero el Ayuntamiento parece ser que no está por la labor. A la vista de ello, está claro que los dos primeros proyectos, así como la Torre del Orejón, pasarán a la historia sin haber sido posible su realización. No sé si he sabido expresar lo que deseaba decir con relación a la plaza, pero si que pediría desde estas páginas al Ayuntamiento que, de una vez por todas, se adecentara como se merece la Plaza Mayor de un pueblo.

Esperando pronto poder ver realizado mi deseo recibid un saludo de:

Rafael Valdés Requena (Ravare)

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