En días pasados hemos tenido ocasión de sentir vergüenza ajena leyendo comentarios acerca del concejal Juan Carlos Pedrosa. Hasta mi compañera de columnas Rosa No le dedicó la suya semanal en la que, discúlpame Rosa No, se ponía de manifiesto la ausencia de argumentos para atacar al concejal y de paso al resto del equipo de gobierno.
No hace falta que sea yo quien venga a explicarles a Uds. que hace escasamente un mes y medio que tomaron posesión los miembros del Equipo de Gobierno capitaneados por Celia Lledó, y que, es evidente, en este corto espacio, da tiempo a lo que da tiempo. Poco más.
Pedrosa ha anunciado el inminente inicio de las obras para la construcción de la Oficina del Inmigrante, un proyecto que viene de la legislatura pasada siendo Paco Montilla el concejal titular y competente. Un proyecto que, además, viene financiado y apoyado por la Generalitat Valenciana, y en el que intervino con gran implicación personal la Sra. Diputada María José García. Tome nota algún forista ignorante de estos detalles.
Recuerdo que Montilla ensalzaba la labor de la diputada y ésta la del concejal, y es que una cosa que tenemos clara cualquiera que hayamos conocido la labor de Montilla es que nos encantaría tenerlo en nuestras filas, seamos del PP o de cualquier otro partido. A título personal, no es la primera vez que expreso mi pesar por la baja de Paco en la gestión municipal, porque hemos podido verificar muchas veces su buena labor en la concejalía durante estos cuatro años, y si no me han informado mal, incluso en el momento de realizar el cambio de poderes, ha entregado de forma perfectamente ordenada su cartera al nuevo edil que le sustituye desde el pasado 10 de junio.
Desde esa perspectiva, estoy seguro, Paco Montilla habrá aplaudido el anuncio realizado por Juan Carlos Pedrosa acerca de la nueva dependencia municipal para atender a los inmigrantes, porque sus objetivos eran y son lograr esas mejoras sociales, al margen de quien sea quien las firme.
Algo muy similar ha venido a demostrarnos el Sr. Pedrosa; su frase ante los medios: no vengo a ponerme medallas sino a trabajar por la ciudad, define lo que, a mi juicio, es un buen gestor. Y lejos de lo que dicen los malintencionados comentarios en los foros, la frase, y lo que es más importante, la realidad de éste concejal, viene a unirse a la mostrada recientemente por el Sr. Abellán, el concejal de Fiestas, quien ha aceptado de buen grado las sugerencias que le han enviado para mejorar las presentaciones de los cargos festeros, entre otros asuntos de mayor calado de los cuales iremos teniendo noticias muy pronto y que, por lo que se dice en los mentideros de la ciudad, huelen a trampa.
Imagino que los foristas que no dudaron en echar mano del origen de Pedrosa para tratar de descalificarlo estarán diciendo que decir se puede decir mucho, pero lo importante es hacer. Pues mire Ud. que tuve la ocasión, por mera casualidad, de encontrarme con el edil en cuestión el sábado a eso de las 15:30 horas. Mientras la mayoría estábamos de fin de semana y hasta de vacaciones, él estaba intentando concluir su mañana de trabajo para poder comer y continuar con otros compromisos vespertinos.
Hablé un rato no muy largo con él, pero fue suficiente para comprobar que viene directo, como él dijo, a trabajar por Villena, la ciudad de su esposa
su ciudad. Tomen nota, los inmigrantes, de esas maledicientes lenguas que desprecian la labor de las personas por no ser nacidas en Villena.
