Cartas al Director

Pena y Gloria

Fuimos muchos los ciudadanos que acudimos el pasado 24 de abril al Pleno de sesión Ordinaria del Ayuntamiento de Villena. Un pleno esperado, cargado de contenido e importancia para nuestra ciudad, debido a determinados puntos del orden del día que cobraban una relevancia especial en cuanto a la gestión del nuevo equipo de gobierno del Partido Popular, como es la aprobación del Convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y la Generalitat Valenciana para la rehabilitación de nuestra Plaza de Toros y el primer paso para la construcción de un centro comercial de más de 100 mil metros cuadrados para Villena.
Sin duda, para muchos ciudadanos, al igual que para Nuevas Generaciones del Partido Popular, nos pareció un Pleno histórico en la vida política de nuestra ciudad, donde se dieron los primeros pasos de dos proyectos ambiciosos e importantísimos, dos proyectos donde están depositadas muchísimas ilusiones de muchos villeneros, que no hace sino poner de manifiesto el tesón, el rigor y la buena gestión que está demostrando el equipo de gobierno del Partido Popular.

No obstante, muchos creíamos que ese pleno iba a estar marcado por la relevancia en cuanto a la gestión de dos de los principales proyectos para la ciudad, sin embargo, la impertinencia, el no saber estar y la mala educación de determinadas intervenciones del anterior edil de Urbanismo, contribuyeron a enturbiar y ennegrecer unos verdaderos y auténticos logros para Villena y los villeneros. Al parecer, esta persona, que también fue edil de Comunicación en la pasada legislatura, adquirió ciertos conocimientos de la materia, aplicándolos en este caso, entorpeciendo, polemizando y convocando una rueda de prensa el día siguiente del Pleno para que por supuesto, no se hable de lo importante, sino de la anécdota más bochornosa y verdaderamente irrelevante: la intemperancia, obscenidad y estupor del Partido Socialista ante los primeros pasos del cumplimiento del programa electoral del Partido Popular.

Mientras unos se dedican a trabajar, a lograr grandes proyectos para la ciudad, a consagrar todo el tiempo posible a que lo dificultoso se convierta en sencillo y en tangible para el conjunto de los ciudadanos, otros, en cambio, se dedican a entorpecer, retrasar, vociferar, enturbiar, ensombrecer y empequeñecer lo verdaderamente importante, sencillamente sacar adelante los proyectos que los ciudadanos de Villena han elegido el pasado 27 de Mayo. A muchos nos pareció un pleno histórico el del pasado 24 de abril, de gloria y satisfacción para la ciudad, en cambio también de pena y furor de alguno de los dirigentes de la oposición.

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