Es lo que siempre pasa en los pueblos, al que levanta la cabeza, al que tiene iniciativa, a quien es capaz de ver más allá de sus narices le salen enemigos por doquier, ¿por qué? Pues creo que en la mayoría de las ocasiones, por pura envidia, ni más, ni menos.
Si Ud. es un emprendedor, un empresario a quien ruedan bien los negocios, una persona que es capaz de gestionar adecuadamente sus activos para que éstos, a su vez, produzcan más beneficios, Ud. tendrá muchos enemigos. ¿Por qué? Por pura envidia. Si Ud. o cualquiera en un pueblo destaca por su labor en beneficio del pueblo, en defensa de sus propios intereses y los del pueblo, si Ud. es una persona entregada a esa lucha, Ud. tendrá muchos enemigos. ¿Por qué? Por pura envidia, seguro.
Y de la defensa de los beneficios del pueblo, de la lucha por salvaguardar los intereses del pueblo además de los propios, como hacemos cualquiera de nosotros, sus enemigos se quedarán, única y exclusivamente, con esa parte, la que habla de sus propios intereses, obviarán cualquier buena acción que beneficie colectivamente al pueblo, se centrarán sólo en el beneficio personal y siempre, esos enemigos, dirán que Ud. lo hace por ese interés propio. Esos enemigos, otrora amigos, pasan de un bando a otro con la misma facilidad con la que se consideran perjudicados por las actividades que Ud., emprendedor y luchador en pro de su pueblo, desarrolla. Si me das lo que quiero yo te quiero, si no me lo das, te vas a enterar.
El revanchismo y la sed de venganza tienen en la demagogia a su más firme aliada. A Ud., empresario de pro, luchador incansable, le acusarán de tener intereses propios, ¿por qué? Porque consideran que sus actividades han mermado los intereses de ellos, los intereses particulares de cada uno de ellos. A Ud., persona del pueblo, comprometido con el pueblo, le acusan, ni más ni menos de aquello que a ellos escuece.
Da igual que sus propuestas empresariales generen empleo, da igual que sus empresas generen riqueza para el pueblo, le acusarán de crear riqueza para Ud., ¡qué barbaridad! Como si las empresas no se creasen para beneficio propio, como si muchos, por no decir todos, los que le acusan de velar por sus propios intereses, no estén haciendo precisamente eso, defender sus particulares intereses que no son, insisto, que no son, los intereses del pueblo, y el pueblo, a muchos de ellos, se lo ha dicho de forma contundente. Pero hay que insistir en el error, no asumirlo, no rectificarlo. Hay que cargar contra todo aquello que, en sus mentes, tengan identificado como enemigo, como parte integrante de lo que, en opinión de algunos, fue causa de perder sus intereses personales. Y es que una persona emprendedora, un empresario de éxito, una persona luchadora, una persona del pueblo y con carisma es una persona que los miedosos consideran peligrosa, una persona a la que temen, un objetivo a destruir porque luchar con argumentos está demasiado lejos para ellos, es inalcanzable.
Póngase la planta de Danone porque genera riqueza para Villena, y si mañana viene el flan Dhul, pues también, porque también genera empleo, y hagamos el puerto seco porque es riqueza para Villena y Villena necesita crear riqueza e ilusión por el futuro.
Si tú, amigo Andrés, sientes que te presiona gente como la que acabo de describir, piensa que por cada mano enemiga, tienes cien manos amigas de personas que creemos en ti.
