A falta de pan, que no falten tortas
Menuda semanita que hemos llevado con la huelga del transporte, el mundo parecía hundirse para miles de ciudadanos, era como volver a los tiempos del racionamiento y las colas ante gasolineras y supermercados se incrementaban con el paso de las horas.
Bajé el pasado miércoles al supermercado como si tal cosa y cuál fue mi sorpresa al ver la mayor parte de las estanterías vacías, no encontré ni leche desnatada para paliar mi colesterol. Viendo que algunos clientes salían con los carros llenos de aceite y harina y comentaban que a falta de pan que no falten tortas, me vino el recuerdo de lo que me contaba mi padre, que en tiempos de guerra se comían fritas las peladuras de patatas, así que me encaminé hacía la zona de la verdura, pero hete ahí que ni patatas quedaban.
Lo que no logro entender es que se acabaran las servilletas y el papel higiénico, eso ya me dio que pensar, ¿que motivos pueden llevar a los ciudadanos a acabar con el papel higiénico? La única respuesta que encuentro es que el que llevaba el carro de harina y aceite hubiera hecho un viaje anterior y acaparara todo cuanto pudiera llevarse, para el mercado negro, o bien la poca confianza que inspira la política del Sr. Zapatero y que provoca entre los ciudadanos esa sensación que, tras descomponérsete el cuerpo, sales corriendo, y esto haya llevado a muchos ciudadanos a acaparar este producto.
Con esto no quiero decir que esté de acuerdo con los huelguistas en su forma de actuar, pero sí que es indicativo de cómo esa crisis nunca aceptada por parte de este Gobierno está calando en los ciudadanos y se ha visto reflejada en una forma de proceder poco habitual, han llenado frigoríficos y arcones con productos alimenticios en la seguridad de que esto se iba a alargar en el tiempo el hambre es mala consejera, otros teníamos claro que debíamos de ir descongelando todo aquello que vamos dejando semana tras semana y esperar fueran limando asperezas las partes implicadas, pero lo más preocupante, como decía anteriormente, fue acabar con el papel higiénico.
Y todo esto acaba de empezar, debemos ir acostumbrándonos a ir perdiendo poder adquisitivo, el petróleo va a seguir subiendo y/o tomamos la decisión de consumir menos o cada día vamos a ver incrementados los precios dependientes de este producto a pesar de que también se reconoce que parte del precio actual del petróleo viene de la especulación y ahora estamos sufriendo la consecuencias de una falta de planificación, y aquí los gobiernos sí que pueden intervenir.
Si con el petróleo no tuviésemos bastante, para el próximo mes de julio se nos viene encima la subida de la luz, que va a representar para 15.000.000 de usuarios con una potencia contratada de entre 2,5 y 5 Kw el 10,60% de incremento (los de menos consumo) y el 11,30% para 2.000.000 de usuarios con una potencia superior a 5 Kw según datos de Ceaccu.
Mientras escribo este artículo y tras el repaso de la prensa nacional y provincial me choco con una última noticia que nos dice bien claro por dónde van a ir los próximos pasos de este Gobierno, que no va a ser otra cosa que recortar todo aquello que sacaron de la chistera de cara a la elecciones y prueba de ello es el borrador de una Orden para modificar el Real Decreto 1472/2007 Renta Básica de Emancipación (ayudas alquiler para jóvenes) que va a provocar que el 77% de los solicitantes no puedan acceder a esta ayuda.
Ahora empiezo a entender la falta de papel higiénico.