Acuerdo entre ayuntamiento y hosteleros para la ordenanza sobre sillas, mesas y terrazas

Fumata blanca entre ayuntamiento y hosteleros de Villena para la aprobación de la nueva ordenanza sobre ocupación de la vía pública, aquella que regulará la colocación de terrazas, sillas y mesas en las calles. El periodo de negociación ha servido para rebajar mucho las intenciones iniciales del equipo de gobierno Verde.
El objetivo, según el alcalde, es aprobar el texto en el Pleno de marzo, que todavía no tiene fecha para su celebración, pues las vacaciones de Semana Santa y Pascua impiden la normal convocatoria del mismo. En cualquier caso, y según Esquembre, finalmente se ha alcanzado un acuerdo entre las partes, por lo que todo parece indicar que la nueva ordenanza va a seguir su tramitación con normalidad y será aprobada en un breve espacio de tiempo.

Aunque el texto inicial suscitó el rechazo entre el colectivo de hosteleros, debido a las importantes imposiciones que acarreaba, lo cierto es que el equipo de gobierno ha rebajado en gran medida sus pretensiones iniciales, acordando con los hosteleros un texto muy parecido al actualmente vigente. En cualquier caso, señalaba el alcalde, “se mejora la situación actual y se eliminan los agravios comparativos, definiendo quién tienen derecho a sacar sillas y mesas y en qué número y superando las deficiencias que existían hasta ahora”.

Otras ordenanzas
Tanto este texto como otros serán debatidos en una Junta de Portavoces a celebrar este jueves, en la que primero se fijará la fecha del Pleno de marzo y posteriormente se quiere consensuar con la oposición tanto la ordenanza sobre ocupación de vía pública como otros textos que trabaja en estos momentos el equipo de gobierno, como las ordenanzas de transparencia municipal, el reglamento de participación ciudadana o el nuevo pliego para sacar a concurso la limpieza de los edificios municipales.

También sigue pendiente la aprobación del presupuesto municipal para 2016, un presupuesto que según el alcalde “no va a presentar grandes variaciones respecto a los anteriores, con unos ingresos y gastos de entre 22 y 22.5 millones de de euros”. Al respecto, lamentaba que las imposiciones del Gobierno central estén retrasando el trabajo, “al obligarnos a devolver la parte de la paga extra congelada en 2012 y que asciende a 280.000 euros, al tiempo que nos impide endeudarnos, es decir, que tendremos que sacar ese dinero de otras partidas”.