Apuestas altas y cuentos locales: el impacto del juego en Alicante
La población ve a la industria del iGaming como una actividad que hay que manejar con prudencia y responsabilidad

Es curioso como muchos de los residentes de Alicante que son amantes de los cuentos locales o que disfrutan de sus historias y leyendas urbanas, también se sienten atraídos por los juegos relacionados al casino y a las apuestas altas.
Algo que se hace aún más evidente en la población joven, lo que parece indicar que las grandes emociones que se desprenden al escuchar cuentos locales y disfrutar de una buena historia, son parecidas a las emociones que genera estar dentro de un casino online, por ejemplo.
En este sentido, este artículo abordará el impacto que ha tenido en la población la llegada de las apuestas a través de las distintas plataformas online en la ciudad de Alicante. ¿Hasta qué punto vale la pena todas esas emociones provenientes del azar? Pues es momento de emular al mítico Cabezón y escuchar con atención las siguientes líneas. ¡Sigue leyendo!
El impacto de apostar con el tiempo: ¿está Alicante alejado de este?
Puede que la actividad misma de apostar, ya sea en apuestas deportivas o directamente en casinos online, no sea algo perjudicial. Siempre y cuando se haga de manera responsable, al final del día es una forma de entretenimiento.
El problema es que todas esas emociones que genera apostar pueden resultar perjudiciales con el tiempo, especialmente para los jóvenes, quienes pueden terminar gestionando de mala manera su presupuesto. Un grave inconveniente que puede dejar severas consecuencias.
Y si a ello se le suma la fácil accesibilidad con las nuevas tecnologías a todas las plataformas de apuestas online, se entiende el auge tan acelerado que ha experimentado la industria del iGaming dentro de países como España, por ejemplo.
Ahora bien, es este impacto no muy positivo el que ha afectado a una parte de la población de Alicante, así como también, a personas de otras comunidades de la región valenciana, quienes en busca de emociones y entretenimiento han encontrado en las apuestas altas y riesgosas una actividad recreativa, pero que al no ser manejada con responsabilidad puede resultar perjudicial con el tiempo.
En este sentido, ha existido un impacto social relevante dentro de algunas localidades de Valencia, razón por la cual las instituciones pertinentes y la sociedad civil han actuado.
Acciones para concientizar a la población acerca del juego y las altas apuestas
Aunque no todos los jugadores son problemáticos y pueden tener una vida tranquila apostando de vez en cuando con un presupuesto bien administrado para ello, la realidad es que esta actividad genera riesgos y ha causado cierto malestar en un sector de la población valenciana.
Todo esto ha llevado a que se pongan en marcha políticas públicas que han promovido la sensibilización sobre los riesgos del juego y se ha movilizado capital y recursos para tratar las adicciones que se desprenden de esta actividad.
Este esfuerzo ha visto sus frutos dentro de la Comunitat Valenciana, ya que los casos de personas con problemas o adicciones al juego han descendido notablemente durante los últimos años.
Concretamente, según un estudio realizado por el Plan Nacional sobre Drogas (plan llevado a cabo por la Oficina Autonómica de Salud Mental y Adicciones de la Conselleria de Sanidad), en el cual se realizaron encuestas a personas entre los 15 a los 64 años, se pudo observar como la prevalencia a la adicción o a los problemas asociados con las apuestas descendieron en un 24%.
El promedio nacional de personas con problemas de juego estuvo en 1,7%, para el año 2024. Para ese mismo año, Valencia registró una cifra de apenas 1,9%.
Aún queda trabajo por hacer
Las apuestas no desaparecerán, son una forma de entretenimiento que llegó para quedarse, incluso en Alicante. Pero el impacto social que han generado ha hecho que gran parte de la población entre en conciencia y vea a la industria del iGaming como una actividad que hay que manejar con prudencia y responsabilidad.