Cascos

Los que creen que mandan van siempre a ver las obras públicas con unos cascos de seguridad bruñidos y poco sospechosos de haber sido sudados o salpicados por albañil o mezcla de mortero alguna.

Me pregunto si habrán cubierto alguna vez la cabeza de otras personas y si antes de dejárselos a ellos los lavan y los desinfectan; y lo que es más importante, si los vuelven a fumigar después de la visita, porque ya sabemos que corren por ahí muchos virus e incluso algún parásito.

Hace algunos días estuvo por aquí el presidente de la Diputación de Alicante inspeccionando las obras del nuevo parque de bomberos de Villena. Eso nos congratula y nos deja más tranquilos, puesto que el ojo vigilante de la autoridad es garantía de que la construcción se finalizará en plazo, con las calidades negociadas y sin sorpresas presupuestarias.

Estuvo acompañándolo parte de la Corporación municipal para celebrar el acontecimiento y aprovechar para hacerse algunas fotos con esa luz espléndida que tanto favorece a la gente con chalecos reflectantes.

El presidente de la Diputación de Alicante y el alcalde de aquí, tuvieron que dirigir unas palabras, ya que los medios de comunicación se habían enterado, no sé cómo, y estaban allí con los micrófonos.

El presidente de la Dipu es de ese partido del que usted me habla que mandó tanto tiempo en España de manera intachable e implacable sin que se pudiera demostrar caso alguno de corrupción ni de sus dirigentes, ni de sus gobiernos nacional y autonómicos, ni de la institución monárquica a la que rinden pleitesía, ni de la iglesia ejemplar que los bendice.

Amparados en esa ejemplaridad y en sus profundas convicciones, han llegado a la conclusión de que Ellos son España, Ellos son los únicos que pertenecen a España y en justa correspondencia, España les pertenece a ellos.

Por eso se les calienta la boca y dicen cosas como las que dijo el presi de la Dipu sin reparar en que existe legislación que se debe tener en cuenta antes de dar o quitar algo. Dijo el Pre de la Di que en cuanto eche a andar el nuevo parque de bomberos, las antiguas instalaciones pasarán (casi automáticamente) a ser propiedad del ayuntamiento de Villena que fue el municipio que cedió los terrenos en su día y que bla, bla, bla.

El alcalde de Villena, que no es de ese partido del que usted me habla porque es del otro partido que gobierna ahora y también ha tenido y tiene personajes olvidables, conoce sobradamente los tiempos de la administración y todos los papeles que hay que mover para que el elefante de la burocracia se levante del suelo y se ponga en movimiento. Así que no tardó en corregir cortésmente al presidente y le vino a decir que eso de transmitir una propiedad de la Diputación a un ayuntamiento tienes sus cosicas y que tarda, y que ya veremos.

El Presidente de la Diputación volvió a coger el micrófono y dijo que bla, bla, bla y viva la municipalidad. El Alcalde de Villena pensó, con buen criterio, que entre bomberos no hay que pisarse la manguera y que por hoy ya está bien la cosa. Así que todos se marcharon (supongo que a comer dada la hora), sin olvidar quitarse los cascos ya que la inauguración de la feria que tenían por la tarde no requería de ese elemento de protección… Aunque vaya usted a saber.

A lo mejor los cascos de visitar obras públicas son parte del equipo que les dan a los que creen que mandan cuando toman posesión de su cargo. Tendré que preguntar eso. Eso y si les regalan los que se ponen cuando los que mandan de verdad les invitan a visitar sus factorías y sus pirámides.

Por: García Pavón