Política

Cate Hernández: “Con 15 millones de euros podían haber hecho maravillas, pero el proyecto del PP no será rentable ni económica, ni social ni culturalmente”

Los dos ediles Verdes se han repartido el trabajo para oponerse al proyecto de la plaza de toros. Francisco Javier Esquembre ha denunciado que “quedan alegaciones por resolver, hay dudas en el procedimiento, el proyecto es taurino, no plurifuncional, y no responde a las necesidades de la ciudadanía, pues no va a tener un uso cotidiano”.
Por su parte, Cate Hernández ha dividido sus dos intervenciones, usando la primera para desglosar las “importantes irregularidades en el procedimiento”. Así, ha recordado que “se adjudicó el derribo de las gradas sin respetar los plazos y sin aprobar el proyecto de demolición y el estudio de seguridad y salud”. Este derribo, además, se ejecutó 14 días antes de encargar un informe sobre el estado de la plaza –por 11.700 euros– al mismo estudio de arquitectura que ha redactado ahora el proyecto para Secopsa. “¡Qué casualidad!”, decía Hernández, que a continuación lanzaba una batería de preguntas que nadie ha respondido: “¿Para qué se necesitaba el informe si ya se habían tirado las gradas? ¿Cómo se redactó si ya no había gradas que estudiar? ¿Por qué ha cobrado la empresa si el estudio no estaba basado en la realidad? ¿Por qué no se ha contratado a un estudio de Villena?”. Según Hernández, el PP debe responder a todo esto ante la ciudadanía, además de explicar por qué “el arquitecto municipal que hace el proyecto para el PP estando de baja es el que luego tiene que valorar las ofertas, convirtiéndose en juez y parte”. La edil Verde ha pedido al PP, infructuosamente, que “deje la aprobación sobre la mesa hasta que pueda responder a estas preguntas”.

“Una contradicción y una barbaridad”
En su segundo turno, Hernández ha explicado los motivos por los que Los Verdes se oponen a este proyecto, señalando que es “una contradicción y una barbaridad hacer una plaza no permanente con instalaciones taurinas permanentes”, ya que el proyecto destina hasta 800 metros a instalaciones taurinas –chiqueros, corrales, capilla, etc.– en lugar de a usos habituales, como podrían ser “salas de ensayos para grupos, la biblioteca de La Paz o lo que fuera…”. También ha señalado que el “proceso de aprobación dista de ser de toda Villena, pues sólo han tenido participación las peñas taurinas, y a pesar de invertirse 15 millones, con los que se podrían haber hecho maravillas, no se ha garantizado su uso cotidiano, por lo que no será rentable ni económica, ni social ni culturalmente”. Por último, Los Verdes se han opuesto a apoyar un “espectáculo cruel y sangriento de maltrato animal que debería desaparecer”.

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