Apaga y vámonos

Con la nariz tapada

Por desgracia, cada día son más las personas que votan –votamos– en España con la nariz tapada, eligiendo la opción que consideran –consideramos– menos mala entre un abanico de posibilidades que lo único que dan son ganas de echarse a llorar o comprarse una recortada.
El pasado miércoles, 14N, servidor trabajó con la nariz tapada. Trabajé porque no había más remedio si queríamos que usted tuviera hoy este periódico entre sus manos; y trabajé también porque forma parte de nuestras obligaciones informar de cómo transcurrió la huelga en Villena, por ningún otro motivo más, porque lo cierto y verdad es que, ante las constantes agresiones del gobierno, lo que de verdad me pide el cuerpo es echarme al monte y comenzar a acabar uno por uno con los miles de parásitos que están desangrando a nuestro país.

Salvamos con nuestro dinero bancos dirigidos por corruptos, pero dejamos que se hundan las personas –vergonzosa la pantomima del PPSOE contra los desahucios–; amnistiamos a los defraudadores mientras hundimos a los ciudadanos de a pie con injustas subidas de impuestos; dinamitamos la sanidad, la educación, la dependencia… mientras mantenemos los privilegios de la casta dirigente –si vieron el Salvados del pasado domingo y no les entraron ganas de pasar por la guillotina a toda la Diputación de Alicante es que no tienen sangre en el cuerpo…–; reprimimos a quien protesta mientras permitimos que los amos del cotarro sigan llevándose el dinero a espuertas a sus paraísos fiscales… Desde luego, motivos para la huelga hay.

Pero a pesar de todos esos motivos, en caso de haber podido hacer huelga, la habría hecho igualmente con la nariz tapada. Porque creo que la mejor opción –la única válida– es realizar una huelga indefinida hasta echar a nuestros gobernantes –gobierno y oposición– y abrir un periodo constituyente con nueva Constitución incluida, ya que con una jornada de paro lo único que se consigue es abrir aún más la brecha por la que se están desangrando nuestras empresas y puestos de trabajo. Porque no me sale de las narices secundar la convocatoria de unos sindicatos apesebrados y ineficaces, que no representan a casi nadie y llenos de parásitos que lo único que hacen es defender sus propios intereses, no los de los parados y el resto de la clase trabajadora. Y porque me repatea que se sumen a la misma organizaciones como el PSOE, en gran parte responsable de la calamidad que vive hoy en día nuestro país.

Me jode haber tenido que trabajar; me habría jodido secundar una huelga convocada por gente con la que no comparto absolutamente nada. Me jode este país, me joden sus políticos, sus grandes empresarios, sus banqueros, sus mass-mierda, sus sindicatos, sus Monarquías, sus poderes fácticos…

Entre todos la mataron y España sola se murió. Eso sí, arrastrándonos al 99% con ella.

(Votos: 0 Promedio: 0)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba