De estreno en El Debate
No me digan, queridas personas, que no les advertí. Les dije que en esta nueva etapa, como candidato de Esquerra Unida en Villena, me vería involucrado en ciertas aventuras que tarde o temprano acabarían volcándose en este espacio. Les hablé, y reitero mi agradecimiento, de la libertad que esta casa me otorgaba después de casi diez años. Tenemos la fortuna, no crean que en todas partes ocurre igual, de contar con unos medios de comunicación que permiten a cualquier persona transmitir sus ideas y opiniones. Y, bueno, en el fondo no hago más que continuar contándoles mi vida y mis vicisitudes en y con nuestra ciudad.
Por eso en esta ocasión les tendré que hablar de mi debut en un debate político como parte interesada. Hay que agradecer a la Federación de Asociaciones Vecinales que regale a Villena la organización de este evento. Porque proporciona a la ciudad la posibilidad de escuchar e interactuar con quienes quieren optar al gobierno municipal. Y creo que también hay que agradecer no solo la presencia de los grupos políticos, sino su voluntad, sus sacrificios (en muchos sentidos) y su trabajo, dirigidos desde distintos criterios a mejorar nuestra ciudad, estemos o no de acuerdo con sus propuestas.
Les cuento. En esta experiencia del Análisis Villena (la primera fue hace cuatro años) decidieron establecer tres fases. En la primera se seleccionaron varias personas encargadas de exponer su análisis sobre distintos ámbitos: cultural, joven, económico, deportivo, sociosanitario y vecinal (barrios). En esta segunda fase se convocó a los grupos políticos para que expusiéramos a la ciudad un brevísimo análisis de Villena y una breve exposición de nuestras propuestas, tras la que seguiría un debate sobre lo expuesto. La tercera fase, el día 25 de marzo, les dará la posibilidad de plantear preguntas a cualquiera de los grupos políticos que optan al gobierno municipal (abajo les informaré del camino).
Pero entremos en materia. Resulta obvio lo que nos podemos encontrar en seis análisis FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas) de una ciudad a realizar en cinco minutos por cabeza: tópicos, lugares comunes y enumeraciones. Tampoco queda muy definido el apartado de propuestas, en un momento en que todos los partidos estamos elaborando nuestros programas; algunos grupos además todavía no hemos llegado al proceso participativo donde valorar y redactar nuestras propuestas junto a la ciudadanía. Por tanto, las opciones se decantaron por mostrar posturas ante distintas problemáticas, por marcar líneas que serán prioritarias, incluso por hacer balance y exposición del trabajo realizado en el pasado (ayer ya es pasado hoy; y del pasado aprendemos, sí, pero muestra continuidad, no presenta intenciones futuras). Pero no creo oportuno apuntar nada más a estas líneas, prefiero que busquen el vídeo completo del acto en las redes sociales (algo posible gracias al trabajo de Fernando Quiles).
Llegados a la tercera parte del evento: el debate, me siento en la obligación de exponer, por si se hubiera dado algún tipo de malentendido (casual, comunicativo o por descontextualización) que mis palabras acerca del futuro Museo villenero no fueron en absoluto una crítica a su idoneidad ni a su sentido. Mi reflexión se dirigía hacia los discursos acerca de la imposibilidad de gasto de nuestro Ayuntamiento. Y las respuestas que recibí, sinceramente, no me fueron satisfactorias: sobre el gasto que generará el nuevo edificio: personal, limpieza, mantenimiento, promoción y demás; sobre su planteamiento, los planes a corto y medio plazo. No obstante, en lo concerniente a la necesidad, la importancia y las posibilidades del edificio, creo que el criterio de toda la ciudadanía igual que el de Esquerra Unida Villena ha sido y es siempre de apoyo, de positividad e incondicionalidad.
Termino emplazándoles a participar en esa tercera fase del evento, donde mediante redes sociales y correo electrónico se podrán hacer preguntas directas al grupo político que ustedes consideren. Allí, sin papeles en la mano, esperaremos para darles respuestas, o circunloquios, o evasivas. Lo que resultará, sin duda, un buen ejercicio de desnudo ante ustedes, que como la mayoría nos sentimos protagonistas desgraciadamente unos meses cada cuatro años. Por mi parte les diré que les espero allí, impaciente.