La otra mañana que salí a andar con mis amigas por el campo, ahora que ya ha parado de llover, salió la conversación de lo distinto que resulta lo que aparentan algunos en los carteles electorales con lo que escriben en los mismos carteles. La verdad que en algunos casos, que me perdone AGA, la situación llega hasta el ridículo.
Porque una cosa es que riegue los girasoles, como ya comenté en su día, y otra es verlo con el chándal delante de unos graffitis. Vamos, que no pega ni con cola, porque lo de AGA en chándal es muy fuerte. Se lo decía a mis amigas, lo único que le falta a AGA en esa foto es que le hubieran puesto unas rastas. Ya que quiere ir de moderno, que se atreve a ponerse un chándal, que le pongan unas rastas postizas que seguro que le quedan igual que el chándal, ¿por qué ustedes han visto alguna vez a AGA con chándal por la calle?, pues no. Ni mis amigas ni yo recordamos en todos los años que tenemos haberlo visto en chándal. Una de mis amigas que sabe de todo esto nos dijo que esas cosas se las recomiendan los asesores de imagen, que le dicen en cada momento lo que se tiene que poner y lo que tiene que decir. Después de escucharla me quedé pensando que para esta campaña AGA debe tener por lo menos tres asesores de imagen y que entre ellos no se aclaran. Porque vamos a ver, uno le ha dicho que se vista con corbata y que se ponga a regar girasoles. Otro le ha dicho que se ponga el chándal y que se haga una foto delante de unos graffitis y el tercero es el que le ha dicho que se ponga una camisa blanca, como si fuera un rumbero. Quién sabe, a lo mejor, y no lo sabemos, es que AGA ha hecho un concurso de asesores de imagen para ver el que mejor lo saca. Yo creo que el ganador es el que lo ha puesto de rumbero. Yo cuando lo veo no lo puedo remediar, me recuerda la portada de un disco de rumbas; y si no el mensaje: Experiencia con Transparencia. ¡Eso sí que es arte!
De hecho se me han ocurrido algunas rumbas que podrían completar el disco además de la que da título al álbum, una de ellas podría ser No me tiren la plaza, Donde te dije que sí, ahora te digo que no, Alcalde una sola vez, Me quería ir pero no me dejan, Todo por Villena, Himno del Villena Club de Fútbol, etc.
Mi amiga la que entiende, cuando le cuento todo esto me dice que la cosa no va por ahí, que de concurso y de rumbas nada. Que lo que quiere AGA es llegar con fotografías diferentes a todos los públicos, a los deportistas con el chándal, a las amas de casa con los girasoles y a los amantes del flamenco con la camisa blanca. Me quedé de piedra. De hecho se me ocurrió, y a lo mejor lo hago, mandarle unos recortes de los que jugábamos cuando éramos pequeñas, de esos que tenías por un lado la muñeca de papel en paños menores y tú la vestías de los recortes que te salían en la hoja; un día de escocesa, al otro día de princesa, o con minifalda. AGA podía hacer lo mismo, repartirnos unos recortes para que le fuéramos cambiando el disfraz, seguro que le saldría más barato y nos divertiríamos mucho. Podríamos pasar de la caspa a la rasta pasándolo en grande.
