Apaga y vámonos

Economía para paletos

Lo admito, señora. Con las letras tira que va, pero para eso de los números servidor no es más ignorante porque no se puede. Por eso no entiendo ni de lejos según qué cosas, que espero que me aclare algún amable lector tras leer estas líneas.
Lo de los beneficios de la banca y las cajas de ahorros, por ejemplo. Ahora que el gobierno, en el tercer intento de reforma financiera (y lo que queda), ha pedido a bancos y cajas que asuman como pérdidas –en fino se dice “provisiones”– muchos de los solares, promociones, pisos y obras paralizadas a medias que compraron o financiaron en su día, todo el mundo se ha echado las manos a la cabeza al grito de “¿Pero cómo vamos a dar pérdidas en 2012”?, como si eso fuera el acabose.

¿Y qué quieren que les diga? En mi supina ignorancia pienso que si en 2011 gané 20 y en 2012 pierdo 10, me salen unos beneficios de 10 en los dos últimos años, ¿no? Pero es que, además, recuerdo que desde por lo menos el 98 o el 99 todos los bancos y cajas iban superando año tras año sus beneficios, cada ejercicio más que el anterior, sacando pecho y batiendo récord tras récord, en algún caso con cifras tan escandalosas como los más o menos 9.000 millones de euros –billón y medio de pesetas– de beneficios del Santander en 2009. Y digo yo, ¿tan grave es dar pérdidas en 2012 tras 15 años de beneficios continuos? ¿Es que no guardaban algo bajo el colchón por si acaso? ¿Dónde ha ido a parar todo ese dinero?

Otra cosa que me tiene subyugado –y es que debo ser tontísimo– es la factura de la luz, que no hacen más que subirla porque, dicen, tenemos que “compensar el déficit de tarifa”, que según los que saben de esto es la diferencia entre lo que pagamos cada uno de nosotros por tener luz en casa y lo que en realidad le cuesta a la compañía eléctrica producir y transportar hasta nuestro hogar esa electricidad, que al parecer es más caro de lo que realmente pagamos los afortunados españolitos. Inocente de mí, pienso entonces que si yo pago menos de lo que toca, y tú, y tú, y tú… a final de año la empresa debe tener unas pérdidas brutales. Pero resulta que no, porque las grandes compañías –Endesa, Iberdola, Gas Natural - FENOSA, E.ON…– se lo llevan crudo año tras año, arrojando beneficios de miles de millones de euros, incluso ahora, en plena debacle de 2012.

Obviamente, y dado mi proverbial desconocimiento, todo lo escrito anteriormente no tiene sentido, porque de ser cierto lo que expongo todos los partidos políticos pondrían seguro el grito en el cielo y utilizarían todo el poder del Parlamento y el BOE para meter en vereda a bancos, cajas, eléctricas, gasísticas, petroleras y demás glorias de la economía patria y el Ibex 35. ¿Cómo no van a hacerlo si son "nuestros" representantes? ¿Verdad?

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