El Ayuntamiento solo podará los árboles que puedan causar riesgo o daños a las viviendas

La concejalía de Parques y Jardines podará antes de fiestas los árboles que puedan causar riesgos o molestias, o aquellos en los que sus ramas lleguen a las fachadas de edificios u otros elementos. El Consistorio no realizará una poda masiva, sino que se hará en otoño, para no interceder en el ciclo normal de crecimiento de estos seres vivos.

“Queremos informar y explicar el motivo por el que no se van a llevar a cabo podas masivas del arbolado ornamental existente en el recorrido de las Fiestas de Moros y Cristianos, no se trata de una decisión arbitraria o caprichosa sino que tiene su fundamento en el ciclos de este ser vivo, para garantizar su estado y evitar enfermedades”, ha comentado la concejala de Parques y Jardines, Paula García.

La poda de arbolado debe llevarse a cabo en los meses de otoño e invierno, que es cuando el árbol tiene sus reservas de alimentos altas y se encuentra en estado latente, lo que reduce al mínimo la pérdida de savia, el riesgo de enfermedades y maximiza el cierre de las heridas en la corteza provocadas por el corte.

Tal y como ha explicado la edil, la poda es una práctica habitual en jardinería, pero sólo debe podarse por motivos concretos como de formación durante los primeros años, estimular la floración y crecimiento, eliminación de partes secas, poda sanitaria o bien en casos excepcionales, como un ataque severo de una plaga o razones de seguridad. “En otras circunstancias no es aconsejable y por meras razones ornamentales no se podarán árboles, sino que se seguirán los calendarios habituales que garanticen las mejores condiciones de este ser vivo”, ha matizado Paula García.