El Debate: última parte
Pues bien, queridas personas, igual que compartí con ustedes aquí mi estreno en la actividad Análisis Villena organizada por la Federación de Asociaciones Vecinales, vengo a contarles ahora cómo concluye esta aventura. Les diré que al llegar aquella noche a la Casa de Cultura me sentí algo nervioso. No por el público asistente, ni por el evento en sí. Fue más bien por el desconocimiento del formato que habría elegido la organización para realizar el evento. Sabía que habrían unas cuantas preguntas genéricas para todos los candidatos a la Alcaldía, sabía que las preguntas habían sido realizadas libremente por gente Villena y que fueron seleccionadas por la organización; y sabía que habrían algunas preguntas específicas para cada grupo. Poco más: ni las preguntas, ni el orden, ni el tiempo para responderlas.
Al final se resolvió con un cronómetro que descontaba el tiempo empleado para cada respuesta de los quince minutos que se entregó a cada candidato. Las respuestas genéricas, las más, se contestaban en una rueda que iniciaba correlativamente cada formación política. Y las preguntas específicas se iban alternando entre las anteriores. El punto de vista y el tiempo utilizado para responder a estas cuestiones era obviamente una decisión de cada candidato. De modo que nos encontramos de todo. Bien se abordaron señalando los puntos débiles sobre los que actuar, bien mostrando el trabajo más o menos intenso, más o menos significativo, realizado al respecto (en caso de haber estado en el equipo de gobierno), bien se hizo uso de las líneas marcadas por la agrupación nacional (en caso de tenerla).
En mi caso, sin papeles ni documentación, como representante de Esquerra Unida, me tocó abordar dos preguntas específicas (las respuestas a las preguntas genéricas las encontrarán en nuestra web). La primera en relación a la apreciación que nuestro grupo hizo en el anterior debate sobre Participación Ciudadana. En respuesta repetí que para que haya Participación debe haber Información, y para que haya Información debe haber Transparencia. Transparencia entendida como accesibilidad a la Información, de forma sencilla y completa. Transparencia que trata la Información como un modo de concienciación ciudadana, pese a que pueda fomentar la preocupación en algunos aspectos de la vida de nuestra ciudad, porque esa preocupación esperemos sea germen de movilización y esa movilización más allá del derecho al voto cada cuatro años debe ser fortaleza para la representación política: más voces, más brazos unidos para pelear por una causa. Transparencia también para que la Información no se convierta en una fuente de poder: yo sé, tú no (yo sé de lo que hablo, tú hablas sin saber). Una Participación sin condicionamientos es un ejercicio democrático, participar de los problemas, participar en las soluciones, participar en el esfuerzo que conlleva.
La segunda pregunta dirigida a Esquerra Unida ponía en cuestión algo que afecta a todos los grupos que participamos en el debate (y que de hecho fue sacada a colación más adelante). Se refería a la situación de EU Villena respecto a las opiniones y posturas puestas de manifiesto por el grupo nacional de Izquierda Unida o por alguno de los grupos municipales, provinciales o regionales de IU. La pregunta naturalmente aludía a temas de corrupción, a relaciones con Venezuela (¡ !) y, más importante, a la vinculación y aceptación de tales posturas y declaraciones por nuestro grupo. La respuesta era sencilla: el modelo federativo de IU permite que cada agrupación adopte su propio criterio, sin imposiciones respecto a opinión, adhesiones o acciones. El modelo en sus estatutos permite que cada agrupación defienda su entorno, que es el que conoce, y que no pueda ser presionada ni amonestada por una entidad de mayor envergadura. Por lo que EU Villena cuenta con libertad de acción y con el apoyo de sus diputadas y diputados en instancias superiores.
Tema más tarde recurrente entre los grupos villeneros que defendían su libertad de acción pese a la falta de representación regional o nacional, y los grupos que pese a reconocer las injerencias de sus cúpulas en las posturas que toman (tomaron, tomarán) respecto a su ciudad (o pese a su ciudad), defendían las bondades de contar con tales apoyos.