Política

El número de cargos de confianza también entra en juego en las negociaciones para mantener el equipo de gobierno

Mucho se ha hablado estos últimos días acerca de los cambios que pueden darse en el organigrama del equipo de gobierno, incluyendo modificaciones en la composición de la Junta de Gobierno y un seguro reajuste de carteras si se confirma la renuncia de Juan Richart a seguir manteniendo sus delegaciones.
No obstante, hay un segundo debate del que poco se ha dicho, a excepción de que la materialización de estas decisiones quedará pospuesta hasta la aprobación de los presupuestos municipales para el ejercicio 2014: la reducción del número de cargos de confianza contratados por el ayuntamiento, una constante reclamación de los partidos de la oposición que suele encontrar poco eco entre los partidos gobernantes, sean estos quienes sean.

Dicha reducción será impuesta por ley en 2015 gracias a la modificación de la Ley de la Administración Local, que también contempla una reducción del número de concejales. Pero en cualquier caso, y aprovechando que se han puesto todas las cartas sobre la mesa, las formaciones que componen el tripartito han aprovechado sus últimas negociaciones para avanzar en dicha reducción de cargos.

Así las cosas, y aunque todo esté aún sujeto a negociación, por el momento se contempla la supresión de dos cargos y medio. Por un lado, y toda vez que han terminado las obras, dejará de prestar sus servicios el técnico responsable de supervisar la ejecución del Plan Revita. Virtudes Amorós, cargo de confianza de Villena Centro Democrático, y trabajadora municipal en excedencia, dejará de ser cargo y volverá a trabajar para el ayuntamiento, aunque muy posiblemente en un puesto diferente al que desarrollaba antes de sus obligaciones políticas. Finalmente, dos cargos de confianza socialistas –la secretaria del Grupo Municipal, María José Mullor, y la técnico de medio ambiente Ruth Mateo– verán reducidas sus jornadas en un 25% cada una.

De este modo, el PSOE renuncia a “medio” cargo de confianza mientras que VCD lo hace a uno –una salida largo tiempo deseada por Juan Richart–, mientras que Los Verdes mantienen a su secretaria de grupo, alegando que el secretario de Alcaldía, también Verde, no es un cargo de partido, sino que trabaja para la institución, asumiendo además una sola persona lo que en legislaturas anteriores siempre habían desarrollado dos.

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