En tu puerta me cagué / pensando que me querías…
Mientras me cepillo los dientes descubro una nueva cana, en uno de los lados de la cabeza, sobre la oreja: la oscuridad se cierne aceleradamente sobre mí y no me encuentro con ánimo de levantar una sonrisa suficientemente consistente para aguantar todas esas pequeñas cosas que regala el devenir diario. Paso la yema de los dedos cerca de la sien izquierda evitando el contacto con el nuevo y albo recién llegado mientras leo las declaraciones de la concejal popular Ana Más durante su última rueda de prensa. En ella felicita al equipo de gobierno porque por fin da continuidad al proyecto iniciado por su partido (el de ella, claro), culminando así el compromiso electoral de su partido (el de ella, claro).
Porque esto, ahora después de tanto tiempo comienzo a entenderlo, funciona así. Por ejemplo: si yo, mi partido, nos pedimos el soterramiento y dentro de digamos medio milenio se realizara, las tataranietas de mis tataranietos podrían decir que por fin se ha dado continuidad al proyecto iniciado por su partido, culminando así su compromiso electoral [disculpen un momento, voy a acercarme otra vez al espejo, a veces los pelos rubios son tan rubios que al recibir la luz desde determinado ángulo parecen blancos]. Bueno, a lo que íbamos, parece que la señora Más en sus declaraciones presupone desconocimiento y descuido por parte del actual Equipo de Gobierno respecto a las necesidades y las demandas de una Sala de Estudios en nuestra ciudad. Y con la mayor tranquilidad hace gala del local céntrico, con accesibilidad total, amplias instalaciones y un horario estable que su partido prácticamente regaló a Villena y cuyo propietario, fruto sin duda de las casualidades, multiplicó el precio de arrendamiento una vez concluido el contrato vigente, llegando a una cifra que el actual responsable municipal no supo renegociar
Eeeeem, ¿qué me está contando, señora Más? [Resisto la tentación de realizar otra excursión hasta el espejo del baño por miedo a que la cana pueda haberse reproducido].
El resto, el comentario de lo que tan bien les ha venido ahora referido a la rehabilitación de La Tercia y la construcción sobre escombros del Espacio Joven, parecen continuar una línea que merece la siguiente pregunta por parte de la ciudadanía villenense: Entonces ¿lo que hace cada partido en la ciudad debe ser utilizado por él por derecho y, si desgraciadamente se da el caso, por el resto de partidos si muestran gratitud y reconocimiento del mérito?
La cosa rueda de prensa termina con acusaciones al actual concejal que no ocultan ni su falta de fundamento ni las intenciones de desprestigio político hacia su rival. Sin privar al público local de un tópico tan esencial, eso sí, como es el ustedes lo han hecho, pero nosotros lo hicimos mejor (con Rector). Y yo, ya absorto frente al espejo en esta pudrición natural y anunciada de mi cabellera, aún doy para intentar aclarar dónde quedamos en esta historia las personas, porque no lo sé. No sé dónde quedamos, pero sé cómo quedamos: como tontas.