Errores que pueden costar muy caros durante un proceso de divorcio
La asesoría profesional puede marcar la diferencia en los resultados y hacer menos traumática la experiencia
El divorcio suele ser un proceso difícil y, en ocasiones, bastante doloroso. No solo hablamos de un cambio radical capaz de alterar el estilo de vida cotidiano, sino de la necesidad de lidiar con las dudas e incertidumbres. Frente a este escenario, la peor equivocación radica en dejarse llevar por las emociones.
Por esta razón, lo más recomendable es contratar un abogado familiar. Estos profesionales de Barcelona, o de cualquier otra Comunidad Autónoma, tienen los conocimientos y la experiencia necesaria para llegar a una solución favorable para todas las partes involucradas.
Transferir o donar los bienes e iniciar el trámite por cuenta propia
El primer error en el que incurren la mayoría de las personas que están a punto de divorciarse es comenzar ceder sus propiedades o activos para mantenerlos ocultos.
Además del riesgo implícito de involucrar a terceros que después no estén dispuestos a devolver los bienes, debemos recordar que esta acción es rastreable y complica mucho más el proceso, ya que el cónyuge estará en su derecho de formular una demanda frente al tribunal.
Esta es la razón por la que resulta indispensable evitar la siguiente equivocación recurrente: intentar iniciar el divorcio sin asesoría profesional. Un abogado de familia en Valencia representa la pieza clave para velar por nuestros intereses desde el momento de la presentación de la solicitud.
Cambiar de residencia
Normalmente, la ruptura del matrimonio despierta el deseo de comenzar una nueva historia. Sin embargo, es necesario terminar un capítulo para empezar otro y no caer en la equivocada tendencia de cambiarse de lugar. Mudarse de casa, estado o país puede complicar con la finalización del proceso.
En la mayoría de los casos, las decisiones precipitadas traen repercusiones negativas, sobre todo, en separaciones de familias con hijos menores de edad.
Esto se debe a que el cambio implica violar el arreglo de custodia o interferir con las visitas. De cara a una corte familiar, este tipo de acciones es visto como un acto de irresponsabilidad, incluso, conducir a la pérdida de la custodia de los menores, pues ambos padres tienen el mismo derecho a pesar de la disolución del matrimonio.
Ante la corte de familia, usted debe mostrarse como una persona confiable y responsable que sabe cumplir los tratos. Si su conducta quebranta los términos pautados de la custodia, quizá no consiga después el resultado que espera para compartir su vida con sus hijos a pesar de la separación marital.
Comenzar una relación antes de llegar a un acuerdo
De acuerdo a la opinión de los expertos, es contraproducente tener otra pareja al momento del divorcio. Lo más conveniente siempre será esperar a finalizar el proceso antes de iniciar una nueva relación.
No solo se trata de la influencia que un tercero puede tener en el proceso, también existe la posibilidad de poner en riesgo la aprobación de la solicitud de manutención, especialmente, cuando existen antecedentes de infidelidad y se tiene lugar de residencia en comunidades que admiten el divorcio culposo.
¿Cómo llevar un divorcio de forma correcta?
La regla de oro en esta situación es actuar de forma razonable y cooperar. Los abogados de familia coinciden en que todo es más sencillo cuando ambas partes están dispuestas en hacer concesiones en función de llegar a un acuerdo rápido y sin daños colaterales.
La asesoría profesional es innegociable, sobre todo, cuando no entendemos la ley. Asimismo, conviene declarar todos los bienes y activos, ya que ocultar la información genera complicaciones y más retrasos.
En caso de que existan hijos menores, debemos explicarles lo que sucede, por el hecho de que se trata de un proceso difícil. El peor error en este escenario es obligarlos a elegir entre un padre y otro.
Hasta que un tribunal no dictamine la situación permanente de la custodia y establezca una pensión alimentaria, el cónyuge debe conocer el paradero de los niños, ocultarlos es una violación a los derechos, por lo que puede levantar una denuncia frente a las autoridades.
Contratar a un abogado familiar
En el preciso momento que contemplamos la idea de iniciar una separación legal, la decisión más acertada es contratar a un abogado especializado. Este consejo cobra aún más fuerza cuando la expareja se niega a cooperar.
El letrado se convierte en un aliado durante las negociaciones tanto en lo que respecta a la distribución de los bienes, como a la custodia de los hijos y el establecimiento de una manutención justa.
En definitiva, frente al miedo a lo desconocido, es indispensable evitar que las emociones se apoderen de la situación, debemos pensar de manera práctica y buscar ayuda profesional. Los abogados familiares suponen la figura ideal para encontrar una estrategia que minimice el daño financiero y el desequilibrio emocional.
De esta manera, sin importar las circunstancias, la asesoría profesional puede marcar la diferencia en los resultados y hacer menos traumática la experiencia.