Francisco Hernández: el primer cocinero que prepara triguico en China
A su regreso del viaje que le llevó hasta el gigante asiático, Francisco Hernández, cocinero y gerente de Hotel Restaurante Salvadora, nos ha contado su experiencia como miembro del grupo seleccionado por la Escuela Superior de Hostelería de Valencia y su director, Ángel Campillo Soler, para acudir a la ciudad de Guanzhou la tercera más importante de China y participar en la 6ª edición de la la Feria de la pequeña y mediana empresa CISMEF, donde España era el país invitado.
Otros tres cocineros y yo, más un sommelier y un maître acudimos a China con el objetivo de trabajar la cocina española, y más concretamente valenciana, explica Hernández. Como objetivo principal tenían la elaboración de paellas, con complementos de aperitivos y tapas que elaboraron en las instalaciones que les habilitaron a tal efecto.
Durante los días de la feria atendieron a una media de 1.500 personas diarias, que acudían por saber donde estábamos o por los olores de nuestros preparados, señala el chef. Además atendieron en la recepción de la inauguración al Ministro de Industria, Turismo y Comercio Miguel Sebastián, así como a los expositores, que tenían como centro de reunión El Ruedo , stand en forma circular, como una plaza de toros muy conseguida, atractiva, vistosa y muy familiar, lo que contribuyo a que en la lejanía de nuestra patria fuese un refugio astronómico y de relax para visitantes y expositores, apunta Hernández.
Como prometió antes de salir de Villena, en uno de los días de trabajo Francisco Hernández cocinó los tres kilos de trigo que llevó consigo hasta Guanzhou. Si ya habíamos tenido éxito día tras día, ese fue apoteósico, dice. Asimismo destaca que los diseñadores del modisto valenciano Francis Montesinos quisieron fotografiarse con él por haberles acercado nuestra tierra a través de la cocina. Lo mismo Francisco Gómez, propietario de la bodega villenense del mismo nombre, que tenía stand propio, con gran éxito de los caldos de nuestra tierra. Y según él los demás españoles, fuesen de donde fuesen, agradecieron con gran alboroto un plato de caliente de toda la vida
Asimismo contaron con la colaboración de la Escuela de Hostelería Bartenderschool, dos españoles y un colombiano, que pusieron a su disposición instalaciones y alumnos, resultando disciplinados y entregados, con una gran dedicación pese a su juventud, algo que el cocinero ha agradecido. Y al terminar la feria ofrecieron en un restaurante un Festival de Arroces, de los que por circunstancias le tocó elaborar casi 200 raciones (a Banda, Negro, Fideuá, de Verduras y Paella Valenciana).
Al margen del trabajo, decía Hernández, aprovechamos el viaje para conocer otras culturas culinarias, cenando cada noche en un restaurante distinto: filipino, turco, iraní, chino cantonés, chino tradicional, japonés, vietnamita, indio, tailandés, etc. Entre productos raros degustaron tortuga, caimán, cocodrilo, rana, serpiente, pez sierra, esturión... Pero lo que más les llamó la atención fue el tratamiento que en Asia dan a las verduras, con cocciones cortas, crujientes, conservando todas sus propiedades.
Tras la feria viajaron hasta Hong Kong, para participar en una Jornada Gastronómica Española en el Hotel Regal Kaloom, donde se degustaron gran cantidad de tapas típicas españolas.
En conjunto ha sido una experiencia, según Hernández, pues he podido dar a conocer lo que se hace en mi país, en mi comunidad autónoma y en mi Ciudad. Además he sido ser el primer cocinero de Villena que cocina triguico en China y más de 600 raciones de arroz. La convivencia ha sido excelente añade y la relación con mis compañeros maravillosa, pues ha servido para unirnos todavía más. Para terminar y como anécdota, señala con orgullo que Tour España haya elegido el Castillo de Villena para mostrar la imagen del turismo Histórico de España. Si lo sabemos explotar es como si nos hubiese tocado parte de la lotería, concluye.
