Fiestas

Los cambios en nuestras Fiestas deben ser definitivos

Los cambios en nuestras Fiestas se van acelerando año tras año, implantando modificaciones sustanciales en desfiles y reglamento que quizás debieron de haber sido reformados hace unos años cuando, debido a la incorporación de la mujer en la Fiesta, se modificaron todos los esquemas aplicados hasta ese momento.
Durante el mes de abril la Junta Central de Fiestas decide abandonar el máximo órgano festero nacional, la UNDEF, y posteriormente modifica el desfile del Pasacalles, dejando de pasar por alguna de las calles del Rabal. El desfile de la Esperanza también ha sufrido este año modificaciones en el horario, arrastrando a la Misa de la juventud. Dianas, Entrada y Romería también sufrieron cambios hace unos años con el beneplácito de la población, en algunos casos, lo que no nos debe hacer olvidar que también existen grandes detractores de los mismos, es decir, festeros que prefieren mantener las tradiciones.

El problema es que, cuando se abre una puerta, luego cuesta mucho cerrarla, y ya se escuchan voces que piden nuevas modificaciones en otros desfiles, algunos ya adaptados a la ampliación del número de festeros, como es el caso de la Entrada, y otros que no se habían tenido en cuenta, hasta ahora, como es el caso de la Fiesta del Pasodoble y la despedida de la Patrona el día 9 de septiembre.

Nuevas propuestas de cambio
El cambio a aplicar en la mañana Pregón consistiría en adelantar la hora, pasando de las 12 del mediodía a las 11 horas, para que la Fiesta del Pasodoble se adelantase y así dar más tiempo a los festeros, en especial a los Moros Viejos, para comer, vestirse y llegar a la calle Nueva para comenzar la Entrada.

La Entrada es otro de los actos que no satisface a todos los festeros, máxime tras el traslado de la salida a la calle Nueva, lugar que no termina de agradar a todo. En su lugar se propone comenzar en la Plaza del Rollo, donde tanto los festeros como las carrozas estarían emplazados adecuadamente dando más agilidad al comienzo de la Entrada. Acortar este recorrido llevaría implícito alargar hasta la Plaza de Toros el final del desfile, lugar que ofrece más facilidades para dejar las carrozas y la dispersión de festeros que la calle San Isidro.

Despedida de la Virgen
Otros de los cambios que la población demanda se refiere a la Romería de despedida de la Patrona el día 9, pues los actos festeros continúan y los romeros brillan por su ausencia, siendo mínima la asistencia a esta romería. Así, se pide que la romería de despedida se traslade al domingo siguiente, coincidiendo con el día de la Esclavitud, una vez acabadas las fiestas.

Igualmente hay propuestas respecto al emplazamiento de la Despedida de la Virgen. La Plaza de la Virgen se queda pequeña al estar los arcabuceros en el centro, y el público se coloca muy cerca de las vías del tren, lo que crea un gran peligro, pues todos los años a esa misma hora pasa un tren que, Dios no quiera, puede provocar un accidente. ¿No se podría trasladar a la Plaza de María Auxiliadora la despedida? Allí, arcabuceros y público se podrían repartir más cómodamente y no habría peligro de que el tren provocase una desgracia. La Entrada ya se cambió por motivos de seguridad.

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