Más claro que el agua: la comisión propuesta por Antonio Pastor no sirve de nada
Un comunicado de Fulgencio Cerdán, concejal del PSOE de Villena
El edil de Ciclo Hídrico, Antonio Pastor, ha anunciado recientemente que en quince días pretende poner en marcha la Comisión de Seguimiento y Control del Servicio del Agua potable. Una medida, a todas luces improcedente, que vuelve evidenciar la improvisación e ineficacia con la que los Verdes están gestionando los servicios públicos.
La concesión del servicio del agua potable fue licitada únicamente para un periodo de ocho meses. Transcurrido este plazo, ha debido ser prorrogada. Un sinsentido que se añade al hecho de que la creación de cualquier tipo de comisión a un par de meses de la celebración de las elecciones municipales es una decisión absurda. Si tiene que trasladar cualquier información a la oposición res-pecto al funcionamiento del servicio puede hacerlo perfectamente desde la junta de portavoces o de la comisión de obras y servicios.
Al finalizar la legislatura, las comisiones del ayuntamiento decaen y es el nuevo equipo de gobierno quien propone la constitución de los órganos y grupos de trabajo pertinentes. Además, por la premura de tiempo, es prácticamente imposible lograr ningún acuerdo en el seno de la comisión propuesta en la que, por cierto, se ha excluido la participación de algún representante del Foro Económico y Social. Un organismo aprobado por la unanimidad del Pleno la legislatura pasada como representante del tejido asociativo.
Antonio Pastor debería ser consciente de que este anuncio no es más que un intento de tomadura de pelo, tanto a la corporación como a la ciudadanía. Y certifica su incompetencia a lo largo de estos cuatro años en materia de agua. En el mes de abril del pasado año, Pastor se empeñó en licitar la adjudicación de un contrato de suministro de agua potable y alcantarillado con una duración de solo 8 meses, que incluía una subida del recibo de alrededor del 21%.
Además, adquirió el compromiso de que se gestionaría directamente el servicio por el ayuntamiento antes de finalizar la actual legislatura, sin atender a las advertencias formuladas desde el PSOE. En aquel momento ya se le indicó que el margen era muy escaso para analizar, preparar y adoptar una decisión de esta envergadura con criterio. El tiempo ha pasado, la concesión ha concluido y desde la concejalía no se ha iniciado ningún proceso ni para convocar una nueva licitación, ni para absorber el servicio por parte del consistorio.
Así pues, a fecha de hoy nos encontramos con un contrato prorrogado, que se adjudicó en junio de 2018 a FCC Aqualia para el servicio de suministro de agua potable y alcantarillado, que des-acredita a la portavoz Verde, Cate Hernández, quien afirmó en rueda de prensa el 3 de julio: “Esta contrata (del agua) tendrá una duración de 8 meses no prorrogables”.
La historia se repite y otro concejal del equipo de gobierno Verde se equivoca al licitar una concesión de un servicio municipal. Llegados a este punto, y conociendo los antecedentes, lo más sensato es que el nuevo equipo de gobierno elegido en las urnas decida en el próximo mandato cuál va a ser el modelo de gestión del agua potable. En cualquier caso, habrá que valorar todos los aspectos técnicos, económicos y políticos para adoptar la mejor decisión posible que beneficie a la ciudadanía mediante un servicio justo, sostenible y eficiente.
Por: Fulgencio Cerdán. Concejal del PSOE de Villena