Menuda faena
"Enseñar a quien no tiene interés por aprender es sembrar un campo sin ararlo"
Las tardes ya acortan y anuncian el final del verano. En el horizonte apuntan melancolías. Propósitos realizados frente a propósitos no realizados. Pronto empezarán las clases. Al profesorado, camino de un nuevo curso, imaginémoslo como campesinos iniciando una nueva temporada.
En el campo, las labores previas a la cosecha son fundamentales. No menos en la Enseñanza y… Y diciendo campo y Enseñanza… Enseñar a quien no tiene interés por aprender es sembrar un campo sin ararlo.
Lo dijo Richard Whately.
Richard Whately nació en Londres en 1787. Reverendo hijo de reverendo destacó en diferentes disciplinas. Entre otras en Educación y Economía.
Dicen sus biógrafos de la Iglesia Evangélica Pueblo Nuevo que en Oxford, concretamente en la Saint Alban Hall, demostró ser un buen profesor; sabiendo cómo descubrir y desarrollar las capacidades aletargadas de sus alumnos. Aquí la clave. Aquí ese arar preciso antes de la siembra. Aquí esa labor previa y primordial para nuestra menuda faena. ¡Menuda faena!