Desde hace unas semanas los lectores habrán sabido de "Contemplación de la sorpresa", un libro que recoge los artículos que con el pseudónimo de Patronio pseudónimo querido en homenaje al consejero del Conde Lucanor de don Juan Manuel, señor de Villena publicamos en El Eslabón entre 1997 y 2000.
Dos motivos justifican el que estos artículos vean ahora la luz compilados en libro. El primero es que siempre nos gustó compartir estas reflexiones con todos los villenenses. Y El Eslabón sólo lo reciben los villeneros ausentes. Por tanto para muchos paisanos son escritos desconocidos. El segundo, que para esta edición hemos contado con las ilustraciones de Andre que ha hecho un trabajo excelente. Hasta pienso hoy que sólo estas ilustraciones justifican el haber atendido el libro. Los lectores apreciarán estos cuadros donde Andre nos conduce haciendo una lectura sugestiva y libre del libro. Atractiva como las ilustraciones, es la portada. Obra de Pablo Domene de Dosign que ha cuidado junto con María Dolores Martínez el maquetado. Igualmente, el libro ha sido atendido mimado cabría decir por Luis Bonmatí, de AguaClara.
Algunos pensarán que estas personas sólo han hecho su trabajo. Yo no tengo esta sensación porque lo que he apreciado en todo momento es que con quienes he contado lo han tomado más allá de una rutina profesional como labor querida. Precisamente mucha culpa de que el libro vea la luz la tiene Pablo que ha alimentado esta ilusión mía varias veces interrumpida. Interrumpida unas veces por desánimo, también por cierto miedo a redescubrir en estos escritos la memoria de momentos tristes de mi vida, si bien otros de mucha alegría. La vida. Interrumpida también por otras ilusiones como el libro "Álbum de cromos. Prostitución en Villena, 1906-1931", el libro sobre la Historia de la prensa villenense compartido con César López Hurtado y con José Puche Acién, la edición de "Estampas villeneras" de José Guillén alentada por Vicente Prats Esquembre, otros trabajos y obligaciones. Todo fue posponiendo este librito que Pablo nunca olvidó.
Ahora que lo veo impreso no puedo dejar de estar agradecido porque en él veo, haciéndose mi distancia con Villena más grande al pesar sobre ella la memoria, la necesidad de asirme, desde el recuerdo, a una Villena que siempre quise: la Villena del agua, la del castillo de Salvatierra, la Villena de la revista "Villena", la de la música, la del vino, la que sube a las Fiestas de Biar, la de la buena gente que ve transformarse sus espacios emblemáticos perdiéndolos como se perdieron otros... En definitiva, un homenaje, mi humilde homenaje a Villena. Pero además, ahora también escucho en el libro, más allá de lo local, el runrún de los temas universales que ocupan y preocupan al hombre: la vida, la muerte, la esperanza, la política... Aquí mi interés por contar para su presentación con una persona ajena a Villena, una persona a la que no le despistaran los espacios específicos que aparecen. Para ello he querido a Luis Calero Morcuende, profesor de Filosofía, extremeño formado en Salamanca. Calero, autor de "Ficcionario" y "Catecismo pedagógico" entre otras obras sobre ética y filosofía, ha atendido con mucho cariño y dedicación nuestra invitación.
La presentación será este viernes, doce del doce, a las 20:30 en el Salón de Actos de la Casa de la Cultura. En esta hora y lugar presentaremos "Contemplación de la sorpresa"; este libro que ha sido posible, amén de lo dicho, por la colaboración de EPdV y la Concejalía de Cultura del M.I. Ayuntamiento de Villena y por el patrocinio de HORFRES. Las gracias a todos no pagan mi deuda con todos.
