Recientemente se presentaba en el Teatro Chapí el estudio sociológico de la mujer. De tanto oírselo nombrar a mi compañera Isabel, en cuanto oí que lo presentaban se me despertó la curiosidad por conocer un trabajo que ha costado más de cuatro años y que, según parece, habla de todas nosotras. La verdad es que del estudio apenas me enteré, tampoco es que las que hablaron se detuvieran mucho en la presentación del estudio: a excepción de una de las autoras, que para las valoraciones no cuenta, todas dijeron que era maravilloso. Pero ninguna de las políticas que estaban en la mesa se detuvo a explicarnos, aunque fuera por encima, algo de lo que en el estudio se dice. Con lo cual salí del teatro de la misma manera que entré: sabiendo que se ha hecho un estudio pero sin saber qué es lo que dice.
Bueno, para ser justa si que saqué algunas cosas en claro, por ejemplo, la gran preocupación que tiene ahora el PP por la igualdad, lo que me lleva a pensar que al PP le interesa la igualdad cuando está gobernando y no le interesa en absoluto cuando está en la oposición. Si ustedes hubieran escuchado a la alcaldesa se extrañarían de que milite en el PP, porque ni Cristina Almeida hubiera hecho un discurso tan feminista, cosa que no tiene nada que ver con lo que dicen Ana Pastor o Rita Barberá. Pensando en estas cosas, llegué a dudar incluso de que realmente exista el tal Estudio, porque fíjense, hasta hace poco más de un año mi compañera Isabel M. Forte no hacía otra cosa que reclamar que se le dejara verlo, o se le diera publicidad en los medios a su contenido, y en aquel tiempo se le decía desde el ayuntamiento que cuando estuviera terminado. Pero ahora, lo presentan y apenas hablan sobre él, como si el día de la presentación de la Regidora el presentador se pusiera a hablar de la Conversión, un absurdo.
Lo que allí escuchamos fueron buenos propósitos, muchos planes, mucha igualdad de libro, pero pocas menciones al estudio y a lo que se piensa hacer ahora. Lo que me llevó a pensar que a lo mejor el estudio no ha salido bien y por eso la alcaldesa no ha querido hablar de él; o a lo mejor sí que ha salido bien, pero ni Lledó ni Virtu Amorós le echaron un vistazo para saber lo que iban a presentar. La impresión que me llevé es que este estudio, si existe, en manos del PP tiene la misma pinta y cumplirá la misma función que aquellos libros huecos que se venden para llenar las lejas del mueble del salón, nada más que cajas bien decoradas para aparentar.
En lo que tampoco estuvo muy acertada la alcaldesa fue en la elección de la Directora General de la Mujer como invitada al acto, pues después de anunciar que había construido, o iba a construir, más de cuatrocientas guarderías en toda la Comunidad, no tuvo ni siquiera el detalle de anunciar también que en Villena iba a construir una. Eso no se hace con un pueblo como Villena, a Villena se viene a prometer. Parece mentira que en Valencia no le hayan dicho a esta mujer que no puede venir a Villena con el bolso vacío, ¡qué menos que una guardería! Si de todas formas, y con todo lo que nos han prometido, no nos vamos a acordar si no la hace.
