Por fin, en una semana que en lo económico venía marcada por un nuevo dato negativo del paro, Villena tiene una noticia de la que alegrarse, aunque nos encontramos al principio de un largo proceso al que aún le quedan muchos pasos para llegar a ser una realidad.
Y es que, tras dos parones a su proyecto uno en 2008, y otro posterior en 2010, al constatar la intensidad de la crisis y el consecuente descenso en el consumo, la multinacional Danone propietaria de las marcas Font Vella y Lanjarón ha comenzado a dar los primeros pasos para construir una planta embotelladora de agua en nuestra ciudad.
Tras la gran alegría suscitada al conocerse este proyecto, y la decepción que sufrimos cuando conocimos que Danone suspendía el proyecto a causa de la crisis, el expediente quedó durmiendo un largo impasse, aunque en todo momento dejaron claro que la suspensión era temporal. La empresa, que trabaja a medio y largo plazo, pospuso su inversión para que la planta estuviera operativa una vez superado el estancamiento económico, y por eso ahora trabajan con un horizonte de apertura de la misma para 2016 o 2017.
En tales circunstancias, y dado que ya se han alzado las primeras voces en contra, volvemos a reiterar, y lo haremos las veces que haga falta, que Villena necesita y quiere esa inversión y va a pelear con todas sus fuerzas por conseguirla, se ponga por delante quien se ponga, porque nuestra ciudad y nuestra comarca llevan más de 100 años viendo cómo el agua de nuestro subsuelo ha impulsado el desarrollo económico de la provincia de Alicante y saciado la sed de todo el valle del Vinalopó y las comarcas de las Marinas sin obtener nada a cambio, ni siquiera un triste agradecimiento, y ya va siendo hora de tener alguna recompensa.
