Economía

Susana Rodríguez-Navarro, investigadora villenera del Centro de Investigación Príncipe Felipe, amenazada por el ERE tras recibir un prestigioso premio nacional

La bioquímica villenera Susana Rodríguez-Navarro recibió el premio IZASA-Werfen 2011 de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular por su trayectoria científica el pasado 8 de septiembre, coincidiendo con la fiesta de nuestra patrona. Con este galardón, la SEBBM reconoce anualmente la labor de un bioquímico menor de 40 años. Paradójicamente, su laboratorio no podrá continuar trabajando como hasta ahora si el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que se ha planteado en el Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) se ejecuta.
Susana Rodríguez-Navarro es desde 2005 la investigadora principal del Laboratorio de Expresión Genética acoplada a Transporte de ARN, dedicado a entender cómo los RNA mensajeros (ácido ribonucleico) son producidos y exportados del núcleo del citoplasma, un proceso que requiere comprender complejos mecanismos moleculares.

Susana es doctora por la Universitat de València. Tras defender su tesis doctoral, realizó una estancia posdoctoral de más de tres años en el laboratorio del Dr. Ed Hurt, como contratada Marie Curie en el Biochemie Zentrum de Heidelberg (Alemania). Allí descubrió diferentes genes, entre los que destaca “Sus1”, gen que es necesario para la transcripción de los genes y la salida del RNA mensajero del núcleo al citoplasma, un proceso esencial para la supervivencia celular. El premio conseguido viene a confirmar el perfil excelente de su investigación y su prometedora trayectoria científica en el campo de la biomedicina.

Dicha trayectoria ha sido avalada por la evaluación como Grupo Excelente por parte de la Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva realizada recientemente en el CIPF y por la consecución de nuevos proyectos de investigación. Para Rodríguez-Navarro, se trata de “un reconocimiento a la labor científica realizada hasta el momento, y también un gran aliciente para continuar investigando a este nivel en Valencia”.

Carrera en peligro
Sin embargo, la carrera científica de Susana y la de muchos otros investigadores está gravemente amenazada por los recortes presupuestarios que sufre el CIPF. El centro de investigación prevé despedir a más de 100 personas y reducir el salario de los que queden a niveles insultantes. Susana cuenta con un grupo de 10 personas, de las que 5 serán despedidas pese a su gran valía, avalada por este premio. El centro ha presentado 2 ERE´s, uno de despidos y otro de reducción salarial. Susana afirma que el ERE afecta al 100% del CIPF, ya que aquellos grupos que supuestamente continuarán en el centro tras la evaluación científica se quedarán sin apoyo del CIPF y con los sueldos de los jefes de grupo a nivel de licenciados. Éste es el premio que recibirán Susana y su grupo tras años de duro trabajo.

Todo el CIPF está muy preocupado ya que no solo peligran sus puestos de trabajo, sino la inversión que durante estos 6 años se ha hecho con dinero público en el centro y en investigación biomédica. Proyectos relacionados con enfermedades raras, diabetes, cáncer, enfermedades neurodegenerativas… cesarán su actividad y la carrera investigadora de muchas personas en formación se detendrá. La mayor parte de estas actividades las pagamos todos con nuestros impuestos y sería un error gravísimo recortar en investigación en estos momentos de crisis. Son los países que más invierten en investigación los que están mejor preparados para afrontar y salir de estas situaciones.

Movilización de los investigadores
Los trabajadores del CIPF están movilizándose estos días para concienciar a la sociedad de que invertir en investigación es invertir en futuro. Este jueves día 3 de noviembre se prevé una concentración a las puertas del Palacio de la Generalitat y el sábado una concentración en el ayuntamiento de Valencia “Por la Ciencia”. El miércoles, en señal de duelo, se han colocado coronas de flores en la entrada del centro escenificando la muerte de la investigación biomédica en Valencia.

Como conclusión, Susana Rodríguez-Navarro señala que “necesitamos que la sociedad reaccione y le pida a sus representantes, a todos los políticos con puestos de responsabilidad, que no se recorte en investigación. Nuestra calidad de vida, la salud y nuestro bienestar depende de ello”.

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