Toros vs. Monos
¡Salvemos los monos! ¡Matemos los toros! ¿Quién será el siguiente? preguntan los loros con voz exigente faltando al decoro. Y en plena algarada, no se oye a la vaca: silencio prudente hasta ver qué pasa, no tienta la suerte hasta oler la calma. A la juventud se vende el atún con música fuerte y con mucha luz, muestran diferente la cola y testuz. Con este cariz y hace siglos mil un pueblo decente con gente feliz la fiesta en septiembre la celebra así.
La señora Lledó ha tenido la amabilidad esta semana de informarnos sobre el proyecto Primadomus. Gracias a sus palabras se han apagado los últimos fuegos que quedaban en la ciudad. La desconfianza, el miedo y la incertidumbre han desaparecido después de que la alcaldesa transmitiera a través de los medios de comunicación de Villena las particularidades del proyecto. Los resultados de dichas declaraciones han cosechado un efecto inmediato en las voces más escépticas de nuestro entorno. Pese a todo no cabe citar novedades. Es decir, no se ha comunicado nada nuevo, ningún dato que no se conociera desde hace años, desde que el PSOE junto al resto de grupos políticos viajaran a Almere para conocer la Fundación holandesa y sus intenciones. ¿Qué cambia ahora? Cambia la rumorología, el modus operandi, o al menos lo parece. Porque es cierto que en nuestra tierra podemos llegar a desistir en nuestra postura dada la longevidad de los proyectos (ejemplo del que nos rescatan las obstinadas mentes, sin ánimo peyorativo).
Pero cabe el caso de que la respuesta popular ante el asunto de los primates sea ahora distinta porque no han habido boicot, bulos, instigaciones y demás artimañas destinadas a menoscabar la decisión del Equipo de Gobierno. Nadie habla ahora de la herida que se abrirá en Sierras Salinas, ni del posible contagio de enfermedades que la población padecería vía mosquito: SIDA, Hepatitis, Cólera, Artrosis, Mal de los Monos Locos, Mal de Sigourney Weaver? Afortunadamente no se ha dado tal bufonería: argumentaciones que fueron defendidas a capa y espada tras la exposición (idéntica) del asunto por parte del grupo socialista. Hablo de situaciones variadas oídas y vividas en primera persona. De ser así, ¿defenderemos ahora que en la guerra y el amor (y la política) vale todo? ¿Nadie preguntará ahora a nadie el motivo que le lleva a desdecirse de lo que dijo? Parece que no, que digerimos casi todo en el juego político. Aún así, driblando a izquierda y a derecha, siempre hay alguien que no se libra de la quema.
Hoy: los toros. ¿Por qué salvar a primates casi desahuciados y matar toros de aspecto neumático y salubre? Cuesta de entender. Entiendo en cambio que en tales circunstancias incongruentes florezcan flores como Ryta.