Un gran político y un buen hombre
Trabajador incansable, íntegro y honesto hasta la médula. Luchó desde sus competencias municipales para situar a Villena, su ciudad, en el lugar que le correspondía
Hablar de José Martínez Ortega (Pepe Ortega para la mayoría), es hablar de un hombre que entendía la política como parte de su vida, sin reparar en horarios ni tiempo dedicado a ella.
Trabajador incansable, íntegro y honesto hasta la médula. Luchó desde sus competencias municipales para situar a Villena, su ciudad, en el lugar que le correspondía.
Y lo hizo desde el gobierno y desde la oposición. Era un hombre de izquierdas, pero convencido de que las personas no son sólo lo que dice su filiación política, sino que son mucho más que eso, lo que le ocasionó más de una crítica, dentro y fuera de su partido, casi siempre injustificada.
Era un gran político, sin títulos universitarios, pero con una gran capacidad de visión y análisis de la realidad.
Que la tierra te sea leve, compañero.
Por: Rosalía Sanjuán