Parece que han ocurrido unas cuantas cosas este segundo fin de semana de mayo, será cosa de la luna llena. El caso es que como consecuencia hemos vuelto a escuchar al señor Antonio Pastor en los medios, mucho más relajado tal y como corresponde a quien ya no carga con la pesada responsabilidad política de primera línea, confiándonos sus reflexiones acerca del proyecto Primadomus con motivo de la visita de Jane Goodall.
De su testimonio y del de su grupo Verde destacaría su molestia por el feo detalle que la señora Lledó tuvo con la primatóloga al no ofrecerle el libro de firmas de la ciudad (gesto que no sabemos si fue fruto de una inocente distracción o de un premeditado ardid en pro del creacionismo). El caso es que la visita de Goodall confirma que pronto veremos el proyecto como una realidad palpable y que la ciudad puede respirar tranquila frente a los temores de infecciones como el VIH o quién sabe si peores.
En tanto la portada del Epdv anuncia nuevos ingresos en el INEM, responsabilidad de la que queda exento el Equipo de Gobierno local por cesión de culpa al Gobierno Central, a Zapatero, vamos. Aquí en Villena hacemos lo que podemos, aunque habría que preguntar a muchas de las personas que están trabajando lo que les parece echar la jornada diaria sin ver un duro a fin de mes.
La cosa está así, si gobernara José María sería bien distinta. Él no sólo puede sacarnos de esta crisis, sino que habría conseguido que España fuera el único país en el planeta que no se viera afectado. Seguro que él también celebró el Día del Nazareno el 1 de Mayo, tal y como están las empresas no es cuestión de andar encima fastidiando con manifestaciones a favor del sector obrero, tengan en cuenta que a más despidos más contratos, la estadística no tiene nada que ver con lo que usted encuentra en el plato al sentarse a la mesa. Además, no nos engañemos, sólo cuando llevemos unos meses viendo reír a los bancos comenzaremos a reírnos el resto. Pero no nos hacemos a la idea de ser masa. Es el problema de esta época: la individualización. No nos hacemos a vivir y morir como esclavos (tampoco las agencias publicitarias ayudan a ello con sus sé tú, eres único, compra exclusividad edición limitada a 50 millones de unidades). No sé qué dirían al respecto los y las asistentes y artistas que participaron el sábado en las actividades que montó la asociación Vil-Art, aunque puedo imaginar que no sería muy agradecido con el sistema social en que les ha tocado vivir. No problem. Si algo no te gusta debes casi es una obligación luchar para cambiarlo.
