Sociedad

Vacaciones lejos del “infierno”

Así se conoce también a la Hamada, la zona más inhóspita del desierto del Sahara, dentro del territorio de Argelia. Allí, y soportando temperaturas de 50º C en verano, vive el pueblo saharaui, en los 5 campamentos de refugiados de Tindouf que acogen a 250.000 personas en un paisaje inhóspito, muy duro y sin agua. La Asociación Villena con el Pueblo Saharaui “Desierto la Hamada” contribuye, desde hace 10 años, en hacer que los niños que allí vivan olviden por unas semanas sus penurias y disfruten de un verano diferente en Villena.
La acogida de niños saharauis durante los meses estivales se enmarca dentro de la campaña “Vacaciones en paz”, organizada a nivel nacional y gracias a la cual hasta 10.000 niños saharauis se reparten en todas las comunidades autónomas de España para pasar unas vacaciones diferentes. Aunque en algunos años la Asociación Villena con el Pueblo Saharaui “Desierto la Hamada” ha logrado traer en acogida a hasta 30 niños, en esta ocasión, el número se ha reducido a sólo 8, 7 niñas y 1 niño. Por este motivo, sus integrantes han querido hacer un llamamiento a los ciudadanos de Villena y comarca con el fin de que se animen a ejercer algún verano como familia de acogida. Y es que todas las familias que han participado en esta campaña algún verano, coinciden en señalar que es “una experiencia muy gratificante” que recomiendan a todo el mundo porque “es más grande la satisfacción que te dan estos niños que la que les damos nosotros al acogerlos”.

En esta ocasión los pequeños llegaron a Villena el 7 de julio y se quedarán hasta el próximo 8 de septiembre. El objetivo de estas campañas es que los niños saharauis sean atendidos médicamente, que conozcan la cultura española y que actúen como embajadores de su pueblo ante España –que también es responsable de su actual situación política– y otros países europeos para que conozcan cómo viven en los campamentos. Es también una forma de que recuperen su salud y descansen por un tiempo de las extremas condiciones en las que viven en el Sahara para que luego vuelvan a su país con fuerzas para luchar por conseguir la independencia de su país, comentan desde la asociación. En nuestra ciudad, concretamente, son sometidos a diversas revisiones pediátricas, oftalmológicas y dentales, tanto por la Seguridad Social como gracias a la colaboración desinteresada de diversos profesionales de estas especialidades médicas. Asimismo, se cuenta con el apoyo de varias empresas y comercios.

Pero durante este tiempo, no todo es mejorar su salud, sino que también hay tiempo para la diversión y la convivencia con los niños españoles. Así, al llegar a España participan en una fiesta de bienvenida a nivel provincial. Además, disfrutan del deporte, los baños en la playa y la piscina, algo completamente nuevo para ellos, ya que en los campamentos no tienen tan siquiera agua potable. En definitiva, viven las mismas vacaciones que las familias que las acogen. También practican el español, que algunos llevan mejor que otros –a pesar de que lo estudian en su país como 2º idioma oficial– y tienen un encuentro semanal entre ellos, para compartir vivencias y confidencias. Otro aspecto importante de estas “Vacaciones en paz” es que se les da la posibilidad de comer alimentos de los que carecen en los campamentos –donde comen productos en conserva, arroz y lentejas procedentes de la cooperación internacional–, como la carne, el pescado o la fruta y que les lleva a padecer anemia en su mayoría.

(Votos: 0 Promedio: 0)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba