El veinte de octubre de dos mil uno, reciente el atentado contra las torres gemelas del World Trade Center, en declaraciones publicadas en EL PAÍS, el escritor egipcio Naguib Mahfuz afirmaba: Si algo tan inimaginable ha ocurrido en Estados Unidos, también nuestros sueños pueden hacerse realidad, y no solo las pesadillas.
Es la esperanza positiva frente a la adversidad. La confianza en ver cumplidos los anhelos frente a los desvelos de las pesadillas. La seguridad de que sentiremos el frescor de la madrugada tras una noche de sudores febriles. La calma después de la tempestad.
Las violencias terroristas son los malos sueños que, terribles, nos inquietan. Que doliéndonos mucho por su crueldad no matan las esperanzas de una humanidad que aun con sus miserias y desastres, con sus contradicciones, sueña en el buen final que algún día podrá ser. Y serán, nuestros bellos sueños realizados, la realidad.