8 consejos para una mudanza fácil y rápida
Si vas a mudarte pronto y estás atravesando una crisis porque no sabes por dónde empezar, debes intentar conservar la calma y planificar. Tener todo bien organizado producirá que tu ansiedad baje drásticamente y puedas disfrutar del proceso. En este artículo encontrarás algunos consejos que te ayudarán para que la mudanza sea más fácil:
Elige una empresa confiable
Las mudanzas deben ser realizadas por equipos profesionales para que todas tus pertenencias lleguen sanas a destino. Para evitar contratar un servicio de baja calidad, busca información sobre distintas empresas de mudanzas y elige una confiable como www.valencianademudanzas.com. Una buena forma de comprobar que es una buena empresa es leyendo los comentarios de sus clientes en las redes sociales.
Llama a la compañía de mudanzas con tiempo
Contratar una buena empresa de mudanzas sobre la hora es muy complicado. Lo más probable es que, si llamas la misma semana que deseas cambiar de hogar, el mejor servicio de mudanzas ya esté reservado por otra persona y tú tengas que elegir otro que no te agrade tanto. Comunícate para reservar un turno con anticipación.
Selecciona lo que te llevarás
Seguramente tienes muchas cosas que no utilizas hace años y una mudanza es la oportunidad perfecta para deshacerte de ellas. Selecciona aquellos objetos que quieras preservar, regala o dona los que no utilizarás y desecha los que están rotos. Esto significará un gran ahorro en la mudanza, ya que no necesitarás alquilar un camión tan grande ni pagar horas extra por el servicio de carga y descarga.
Lleva contigo las cosas importantes
Aunque se realice con cuidado, en el proceso de mudanza se suelen perder algunas cosas. Para evitar problemas, lleva contigo toda la documentación importante, lo cual incluye el contrato de alquiler o la escritura de la nueva casa, tu documento de identidad y tu pasaporte. Carga en tu bolso las llaves, el móvil y los objetos costosos, tales como joyas. También aquellos elementos que tengan un valor sentimental para ti y sean irremplazables.
Reserva tiempo para embalar
El embalaje de tus pertenencias seguro te tomará muchas más horas de las que crees. Reserva tiempo suficiente para embalar todo y comienza esta tarea lo antes posible. Aprovecha los fines de semana para empacar de a poco las cosas que menos utilizas. De ser posible, solicita una licencia por mudanza el día anterior a la fecha convenida con la empresa para hacer una revisión general y terminar de preparar las cajas.
Si desconoces la forma correcta de embalar, la mejor opción de mudanzas en Valencia puede asesorarte. Esta empresa identifica los puntos débiles de cada elemento y te indica cómo reforzar los paquetes para que ningún objeto se dañe.
Prepara una valija de elementos de uso diario
No debes embalar la totalidad de tus pertenencias, porque al llegar a tu hogar necesitarás algunas cosas. Prepara una valija con aquellos artículos que usas cotidianamente y precisarás los últimos días de estancia en tu antigua vivienda y los primeros en tu nueva casa. Así tendrás fácil acceso a esos elementos.
Es recomendable que mantengas separados los artículos de higiene personal, algunos cambios de ropa y los cargadores de los dispositivos electrónicos. Recuerda armar un pequeño bolso con bebidas y alimentos, porque el día de la mudanza no tendrás fuerzas para ponerte a cocinar.
Escribe etiquetas útiles
No pongas información genérica en tus cajas. Una referencia simple como “ropa” no te servirá cuando estés buscando una prenda específica. Escribe detalladamente qué contiene cada caja y pega la lista en uno de los laterales para que puedas leerla sin problemas, aún si tienes una torre de cajas apiladas en tu nueva casa.
Si te resulta tedioso buscar entre las cajas, asigna un número a cada contenedor y en un cuaderno escribe qué artículos se encuentran en cada uno. De esta manera podrás encontrar lo que necesitas solo leyendo tus notas.
No compres comida
Frecuentemente las personas se ven obligadas a tirar mucha comida cuando se mudan porque no han llegado a consumirla. Cocina los alimentos perecederos que tienes en la heladera y come aquellos productos enlatados que tengan fechas de vencimiento muy próximas. Durante la semana previa a la mudanza evita comprar frutas y verduras, porque es muy probable que no puedas consumirlas.
Si tienes miedo a quedarte sin comida, opta por adquirir alimentos que puedas transportar fácilmente y que no se echen a perder. Los paquetes de fideos o arroz son una buena opción, ya que brindan saciedad y se conservan en buen estado durante mucho tiempo. No tener una alimentación balanceada solo por un par de días no te hará daño.
Mudarse es un poco más complicado de lo que parece, y es probable que te cueste adaptarte a un nuevo lugar. Ten paciencia y confía en que has tomado la decisión correcta. Pronto te sentirás en tu hogar nuevamente.