Que en Villena es difícil circular todos lo sabemos. Que es difícil de aparcar, también. Pero cuando se cortan las calles y no se toman medidas para paliar los atascos, todos los problemas que supone conducir en Villena se multiplican por
¿mil?
Aquí se cortan las calles cuando menos te lo esperas, y si quieres, prudentemente, descongestionar la Avda. Constitución y tomar vías alternativas como lo es la calle Navarro Santafé, antes Casicas de Hellín, te encuentras de sopetón con una grúa que alguien ha colocado, evidentemente por trabajo, y todo el camino que has hecho al subir por la calle Juan Chaumel, lo tienes que deshacer bajando de nuevo a Constitución por una calle regida, circulatoriamente hablando, por un semáforo que aguanta escasamente el paso de tres coches, y claro, a esperar pacientemente metido en un atasco que te lo has buscado por facilitar el tráfico en la Puerta de Almansa.
Lo curioso de caso es que la Policía Local ha estado regulando la circulación casi toda la mañana, pero cuando han tenido que ir a los colegios, a medio día, nadie ha previsto poner una valla en el principio de la calle Juan Chaumel y así evitar que los coches que suben caigan en la ratonera que se forma en El Altico.
En esta ocasión no se ha puesto la valla cuando, curiosamente, estas vallas u otros artificios más caseros te los encuentras por diferentes calles de la ciudad cada vez que a alguien se le ocurre la feliz idea de ponerse a descargar a cualquier hora del día, ya que en los supermercados descargan en ocasiones cuando les viene en gana hasta en la Avda. Constitución
pero que a nadie se le ocurra parar unos momentos en un vado o en carga y descarga, porque si lo hace
¡que Dios le pille confesado y con la cuenta corriente sana!
